«Este segundo pedido reafirma la confianza de DSB en la tecnología y fiabilidad de los trenes Talgo para llevar a cabo la descarbonización del sistema de transporte de Dinamarca y se produce sólo tres años después de adjudicar a Talgo el contrato marco», ha explicado la ferroviaria española. De este modo, DSB ha optado por realizar un pedido en virtud del acuerdo marco inicial firmado a principios de 2020, cuyo valor máximo asciende hasta los 500 millones de euros. El pedido inicial era también de ocho trenes y, según ha adelantado Talgo, las oportunidades de mantenimiento se discutirán en el futuro.
Con una velocidad comercial máxima de 200 km/h, los trenes Talgo 230 contarán con una anchura de caja mayor que la de los coches estándar, lo que permitirá un espacio interior más amplio y un mayor confort para los pasajeros.
«Esto permite mantener al mismo tiempo la plena interoperabilidad técnica para prestar servicio no sólo en rutas nacionales, sino también en rutas internacionales, por ejemplo, conectando las ciudades de Copenhague (Dinamarca) y Hamburgo (Alemania)», ha informado Talgo. Asimismo, los trenes Talgo 230 tienen la capacidad de reducir el consumo de energía hasta en un 30% con respecto al estándar del sector, gracias a la tecnología única de la empresa española en materia de rodadura, y a sus coches de pasajeros ligeros.
Con los ocho nuevos trenes adicionales de Talgo, el transporte ferroviario reforzará aún más su ya destacado perfil de sostenibilidad en Dinamarca, un país que se ha comprometido a reducir para 2030 sus emisiones de carbono un 70%, por debajo de los niveles de 1990, y a ser neutro en carbono para 2050.