«El Gobierno de coalición minoritaria de España parece contento de haber descubierto finalmente un tema en el que puede contar con un apoyo popular abrumador y que le permite retratar a sus oponentes políticos como negadores del genocidio», recalca el medio. «La ridícula hostilidad del gobierno español hacia Israel es, como en otros lugares, un asunto interno», es el titular de esta pieza.
El artículo considera que Sánchez pretende sacar «ventaja» en su «hostilidad hacia Israel» para que los españoles eviten hablar de la corrupción que asola al entorno familiar y político del dirigente socialista. El medio británico señala también que el presidente del Gobierno aprovecha «con alegría mal disimulada» que la oposición, encarnada en PP y Vox, se nieguen «a describir la guerra en Gaza como un genocidio».
Una de las ideas en las que profundiza The Telegraph es el uso que hace el Gobierno de Sánchez de TVE para intentar que los españoles compartan la hostilidad que el Ejecutivo y sus socios parlamentarias profesan hacia el país hebreo. «La guerra en Gaza recibe abundante cobertura en todos los canales de televisión nacionales de libre emisión, incluyendo Televisión Pública de España, el servicio de televisión pública estatal de España, que da a la etiqueta de ‘genocida’ un generoso tiempo de emisión», alega.
Este uso partidista de la cadena pública sufragada por los españoles estaría logrando que los españoles se olvidasen de «las atrocidades del 7 de octubre», en alusión al ataque que perpetró la organización terrorista de Hamás hace casi dos años en suelo israelí y que dejó 1.400 fallecidos y más de 200 secuestrados.
«Las atrocidades del 7 de octubre han desaparecido de la conciencia pública, sustituidas por imágenes gráficas de destrucción, violencia y sufrimiento en Gaza. Como resultado, los españoles se han vuelto cada vez más hostiles a la continuación de la guerra por parte de Israel», argumenta el medio.
The Telegraph menciona también datos proporcionados por el Real Instituto Elcano como que «el 82 % de los españoles considera ahora las acciones de Israel como genocidio, mientras que el 78 % apoya el reconocimiento oficial de Palestina por parte de los gobiernos europeos».
«Mientras tanto, el apoyo al Estado de Israel continúa disminuyendo, situándose actualmente en un exiguo 23 %. Sin embargo, el Instituto Elcano enfatiza que, a pesar de esta enérgica condena al gobierno israelí, no hay indicios de un aumento del antisemitismo en España, que sigue siendo una opinión muy minoritaria», añade el artículo.
A pesar de este uso partidista de TVE por parte del Gobierno de Sánchez, «el Instituto Elcano afirma que ‘los españoles parecen distinguir claramente entre el gobierno israelí y la población judía’». «Si bien condenan ampliamente al primero, la población judía a nivel mundial recibe una valoración positiva media de 5,7 sobre 10. Este hallazgo, según el informe Elcano, refleja ‘la gran madurez intelectual de los españoles’», agrega en este sentido.
Por otro lado, The Telegraph asegura que el Ejecutivo de coalición del PSOE y Sumar «se ha consolidado como uno de los gobiernos más vehementemente antiisraelíes del mundo. El año pasado, junto con Irlanda y Noruega, reconoció el Estado de Palestina y respaldó la demanda de genocidio presentada por Sudáfrica contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia».
El medio británico recuerda en este sentido que Sánchez y otros ministros jalearon los disturbios que se produjeron en la última etapa de La Vuelta. Esta última prueba se tuvo que suspender debido a los disturbios que protagonizaron los radicales propalestinos. «El recorrido fue ocupado tras el derribo de barreras y 22 policías resultaron heridos», remarca el diario anglosajón.
El artículo alude a la reacción que tuvo el dirigente socialista sobre estos disturbios: «’Hoy’, declaró Sánchez, ‘España brilla como ejemplo y motivo de orgullo’. Declaró que su país estaba mostrando al mundo cómo defender los derechos humanos. ‘¡Viva el pueblo español!», exclamó’».
El medio británico menciona también las reacciones de otros ministros como el ministro de Transformación Digital, Óscar López, o el ministro de Cultura, Ernest Urtasun.
Por último, The Telegraph da dos razones que explicarían la hostilidad del Ejecutivo de Pedro Sánchez hacia Israel. «En parte, sin duda, por genuina convicción. España es un país profundamente pacifista que durante mucho tiempo ha preferido gastar su exiguo presupuesto de defensa en misiones internacionales de paz en lugar de en armamento militar. La absurda e inútil carnicería de la Guerra Civil de 1936 a 1939 está profundamente grabada en la psique nacional española», alega el artículo.