La primera, como no, la propia vicepresidenta primera del Gobierno, Calviño, quien ha arremetido con dureza contra Ferrovial por su decisión de trasladar su sede social de España a Países Bajos. Según ha informado EP, la titular de la cartera de economía ha mantenido una conversación con el presidente ejecutivo de la compañía, Rafael del Pino, en la que le ha trasladado “claramente su rechazo” a la medida.
La cartera que dirige Calviño ha asegurado que la empresa le “debe todo a España” y que su decisión demuestra “una falta de compromiso con el país”. “No resulta aceptable que una empresa que ha nacido y crecido en España y gracias a la inversión pública de los ciudadanos españoles muestre esta falta de compromiso con su país”, han remarcado. Para Economía, es “paradójico” que se anuncie esta posible decisión en un momento “de importante atracción de inversión extranjera y confianza” de los inversores y empresas en España, y con un proceso de inversión pública y modernización “sin precedentes” en marcha en los sectores en que está presente el grupo Ferrovial.
Por su parte, la ministra de Hacienda, Montero, ha lamentado la decisión de Ferrovial de trasladar su sede a Países Bajos, aunque ha recordado que más del 80% del beneficio del grupo procede de otros países y, por lo tanto, apenas tributa en España. Las acciones de la constructora suben un 1,4% en Bolsa, aunque han llegado a ganar un 2,4% en los primeros compases de la sesión.
En declaraciones a los medios antes de participar en un acto de la Fundación ONCE, Montero ha destacado que “no hay ningún riesgo de que la parte de inversión que estaba en España se vaya a desplazar”, lo que implica que ese segmento del negocio seguirá tributando en el país y se mantendrán los puestos de trabajo. Asimismo, la ministra ha apuntado que la decisión de Ferrovial se ha conocido tras anunciar una importante reducción de su beneficio, algo que ve “curioso” y por eso cree que “habrá que estar atentos a otras motivaciones” que justifiquen su marcha.
En cualquier caso, Montero ha destacado que en el último año se ha producido un importante aumento de la inversión extranjera en España, lo que prueba que “las condiciones jurídicas, económicas y de estabilidad” son “muy importantes” para estos inversores. Por ello, lo principal es “seguir ofreciendo al conjunto del ámbito inversor las condiciones buenas que tiene nuestro país sobre todo en áreas emergentes”, que responden a la diversificación de la industria española hacia los sectores verde y digital.
Por su parte, el ministro de Agricultura, ha reclamado a Ferrovial que aclare su continuidad y su compromiso con España. “Es muy importante que Ferrovial aclare esa continuidad. Creo que existe esa intención, que es positivo, pero debe ser Ferrovial quien dé la explicación correspondiente y más en un contexto en el que en España estamos recibiendo muchas inversiones extranjeras”, ha asegurado en los ‘Desayunos Informativos’ de Europa Press, patrocinados por Altadis, Cepsa, KPMG, Fujitsu, Telefónica, Fundación IberCaja y Veolia.
El titular de Agricultura ha destacado que Ferrovial es un “gran grupo económico” del que el Ejecutivo se “siente orgulloso”. “No solo no tiene un negocio en el país, donde tiene inversiones y trabajadores, sino también fuera de España”, ha recalcado. Respecto a la posibilidad de que otras empresas decidan seguir los pasos de Ferrovial, Planas ha reiterado que la multinacional “debe explicar el por qué de esta operativa”.
“No quiero entrar en temas cuyo detalle no conozco, pero hay aspectos que clarificar de esa decisión. Espero y deseo que eso no suponga nada en su compromiso con España y la sociedad y de la actividad en el país. Las raíces están muy bien, pero el árbol está mejor”.
Seguridad jurídica
El consejo de administración de Ferrovial propuso ayer una fusión entre la matriz y Ferrovial International, una sociedad anónima europea neerlandesa que ya es titular del 86% de los activos de la compañía, lo que supondrá el traslado del domicilio social de España a Países Bajos.
Además, el grupo informó que pedirá la doble admisión a negociación en ese país, cotizando también en España, para cotizar posteriormente también en Estados Unidos. En cualquier caso, Ferrovial señaló que esta reorganización corporativa no tendrá un impacto en los planes de inversión en España, país que permanecerá como principal fuente de desarrollo de talento.
Con esta operación, Ferrovial se podrá ahorrar hasta 40 millones de euros al año en impuestos si finalmente traslada su sede a Países Bajos, gracias a unas condiciones fiscales más favorables en ese país frente a España, aunque esto tendría un impacto limitado en su valoración bursátil, según señala un análisis de Sabadell.
No obstante, el objetivo principal de la compañía presidida por Rafael del Pino con este cambio en la organización de la corporación no es un ahorro en impuestos, sino una mayor proyección internacional, ya que tener su sede en Países Bajos le abrirá muchas más oportunidades en su principal mercado, Estados Unidos.
De hecho, solo el coste de los trámites para trasladar su sede social a Países Bajos, así como para comenzar a cotizar también en ese país -de forma paralela a España-, será del entorno de los 20 millones de euro. Asimismo, el efecto de un ahorro de 40 millones de euros en impuestos es limitado en una multinacional que facturó el año pasado 7.551 millones de euros y un resultado operativo de 728 millones de euros. La razón por la que Ferrovial podrá ahorrarse entre 35 y 40 millones de euros al año es porque en Países Bajos los dividendos de filiales están exentos de impuestos, mientras que en España la bonificación se limita al 95%.
La compañía, por ahora española hasta que la junta de accionistas apruebe esta operación, controla el 25% del aeropuerto londinense de Heathrow, el más importante del mundo; el 43% de la autopista canadiense 407-ETR, considerada también la mayor del mundo; o más del 50% en Budimex, la mayor constructora de Polonia.
Cuando estas empresas reparten dividendos a sus accionistas, Ferrovial se embolsa una parte proporcional a su participación en el accionariado. El año pasado recibió 475 millones de euros por este concepto, aunque normalmente recibe en torno a 750 millones de euros.
En cualquier caso, el objetivo de la compañía es potenciar el conocimiento de su marca en Estados Unidos, donde residen el 93% de sus inversores internacionales, y mejorar su acceso a las fuentes de capital. El principal accionista de Ferrovial es su presidente, Rafael del Pino, que controla el 20,4% del capital, seguido de María del Pino (8,2%); el fondo británico TCI (6,4%), fundado por Christopher Hohn, un británico multimillonario que aparece en el puesto 273 de la lista Forbes de las mayores fortunas del planeta; Leopoldo del Pino (4,1%) y los fondos BlackRock (3,18%) y Lazard (3%), según figura en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En cualquier caso, el ‘free float’ o capital flotante es del 67%, lo que significa que este porcentaje de capital de la compañía está en manos de minoritarios y susceptible de libre negociación en bolsa.