«Pronto», se limitó a contestar Budanov, jefe de la Dirección Principal de Inteligencia del Ministerio de Defensa ucraniano, a una pregunta de la cadena ucraniana TSN, sin dar más detalles. Crimea lleva bajo control ruso desde 2014, y es considerada como un elemento clave de la contraofensiva lanzada hace unas semanas por Ucrania. En las últimas semanas, la península ha sido escenario de ataques en sus infraestructuras, entre ellos una explosión que ha dañado el puente de Kerch, que enlaza la península con Rusia.
En declaraciones adicionales, Budanov restó importancia a la presencia de mercenarios del grupo ruso Wagner en la vecina Bielorrusia y aseguró que no ha percibido un aumento significativo del número de efectivos rusos que combaten en Ucrania. «Hay tantos como había antes. Lo que sucede es que su constante movilización les permite reponer efectivos constantemente», ha añadido.