A pesar de que ha registrado un «modesto crecimiento», el índice todavía se mantiene muy por debajo de su media a largo plazo y sigue siendo inferior a su nivel de febrero del año pasado, antes de la invasión rusa de Ucrania, cuando se ubicó en -9,5. «El dato sugiere que la caída de la inflación general está ayudando a impulsar la confianza, compensando los impactos moderadores de la creciente incertidumbre geopolítica y la tendencia alcista de los tipos de interés e hipotecarios, que ha continuado a pesar de que el ciclo de ajuste del BCE está llegando a su fin», valoran los expertos de Pantheon Macroeconomics.
«La aún moderada confianza de los consumidores de la zona euro sugiere que los hogares seguirán frenando el gasto en los próximos meses, retrasando la recuperación económica», indican.
Asimismo, añaden que «es probable que se produzca una nueva mejora en el sentimiento, ahora que la inflación de las compras frecuentes de bolsillo está disminuyendo drásticamente. La caída de la inflación de los artículos de primera necesidad suele mejorar las perspectivas de los consumidores sobre su situación financiera. Pero la confianza tendría que aumentar significativamente más para que cambiemos de opinión sobre el estancamiento del gasto de los hogares en el cuarto trimestre, si todo lo demás permanece igual. Dudamos que esto suceda en diciembre».