Entre los principales componentes de la inflación, los precios de la energía subieron un 0,2%, frente al repunte del 1,9% de enero. Por el contrario, los alimentos frescos subieron su coste un 3,1% en comparación con el 1,4% de enero, lo que representa, además, su mayor encarecimiento desde enero de 2024.
Por su parte, los servicios se encarecieron un 3,7%, frente al 3,9% del mes anterior, lo que supone la menor subida desde abril del año pasado. Además, los alimentos, alcohol y tabaco subieron un 2,7%, frente al 2,3% de enero, y el coste de los bienes industriales no energéticos creció un 0,6%, frente al 0,5% del mes previo.Por países, las mayores tasas de inflación se dieron en Estonia (5%), Croacia (4,7%) y de Bélgica (4,4%). Por contra, Francia (0,9%), Irlanda (1,3%) y Finlandia (1,5%) registraron las menores subidas de precios en febrero.
Excluyendo del cálculo los precios de la energía, los alimentos frescos, el alcohol y el tabaco, la tasa de inflación subyacente de la zona euro se moderó también una décima, hasta el 2,6%, su menor lectura desde enero de 2022.