Cabe recordar que el pasado mes de junio la producción industrial aumentó un 0,4% tanto en la zona euro como en la UE (revisado a la baja desde el 0,5% inicial en la zona euro), por lo que los datos de julio han dejado un sabor amargo en los mercados.
Si se analizan los datos mensuales más al detalle, en la zona del euro la producción de bienes de consumo duradero cayó un 2,2%, mientras que la producción de bienes intermedios creció un 0,2%, la de bienes de consumo no duradero un 0,4% y la de energía un 1,6%. Por su parte, en la UE la producción de bienes de capital cayó un 2,4%, la de bienes de consumo duradero un 1,9% y la de bienes de consumo no duradero un 0,8%, mientras que la producción de bienes intermedios creció un 0,2%. La producción de bienes intermedios creció un 0,1% y la de energía, un 1,5%.
Eurostat apunta también que entre los Estados miembros de los que dispone de datos, los mayores descensos mensuales se registraron en Dinamarca (-9,1%), Irlanda (-6,6%) y Lituania (-4,4%), mientras que los mayores aumentos se observaron en Suecia (+5,1%), Malta (+3,4%) y Hungría (+2,9%).
Sobre la comparación interanual, en la zona euro la producción de bienes de consumo duradero disminuyó un 6,7%, la energía un 5,7%, los bienes intermedios un 5,0% y los bienes de consumo no duradero un 0,6%, mientras que la producción de bienes de equipo aumentó un 0,4%.
En julio de este año, respecto al séptimo mes de 2022, en la UE la producción de energía cayó un 7,4%, la de bienes de consumo duradero un 7,3% y la de bienes intermedios un 5,5%, mientras que la producción de bienes de consumo no duraderos aumentó un 0,5% y la de bienes de equipo un 1,0%.
La oficina estadística remarca también que entre los Estados miembros de los que tiene datos, los mayores descensos anuales se registraron en Bulgaria (-11,5%), Estonia (-9,5%) y Letonia (-8,6%). Se observaron aumentos en Dinamarca (+5,7%), Francia (+2,8%) y Malta (+2,3%).