Así lo afirmó en la sesión de control al Gobierno en el Congreso en la que Sánchez le afeó que, de 22 preguntas parlamentarias que el líder de la oposición le ha formulado desde su desembarco en la política nacional, no se haya interesado nunca por la economía, el empleo, la sanidad o la vivienda. El careo entre ambos arrancó con Feijóo cambiando su pregunta parlamentaria e interesándose por saber “cuánto más” les costará a los españoles “que siga en La Moncloa” ante la última amenaza del líder de Junts, Puigdemont. El presidente del Gobierno, sin embargo, se ciñó a la cuestión inicial, que le instaba a aclarar si sus prioridades “coinciden” con las de los españoles, y respondió que “sí”.
“No ha habido suerte”, lamentó Feijóo. “Al menos, si no responde, no miente”, apostilló antes de señalar que “su precariedad parlamentaria es comparable con su debilidad judicial”. Entonces volvió a hacer referencia al último órdago de Junts y remarcó que, donde el Gobierno ve “entendimiento”, sus socios ven “engaños”. Y pasó al ámbito judicial para subrayar que dónde Sánchez ve “comportamientos ejemplares”, los jueces ven “indicios de delito”. “Siento tener que decírselo, señor presidente, no es agradable, pero en su mesa de Navidad se sentarán al menos dos imputados y, cuando regrese al trabajo, sus socios le estarán esperando para cobrar la investidura, la vicepresidenta Díaz seguirá repitiendo que el Gobierno no gobierna, Podemos seguirá especulando con su caída y los independentistas volverán a recordarle que, sin ellos usted, no es nadie”, declaró.
Feijóo se dirigió entonces a la portavoz de Junts en el Congreso, Nogueras, para ratificar que “claro que Sánchez no es de fiar” y avisarle de que “les va a seguir engañando”. “Yo se lo he dicho y hace mucho tiempo”. Y acto seguido instó a Sánchez a que “deje de comprar el poder con la dignidad y el dinero de los españoles”.“Usted pretende conseguir el apoyo de sus socios como el Gobierno con sus mordidas: con el dinero de los españoles. Y estamos hartos de seguir pagando con el dinero de todos el que usted haya perdido las elecciones. Nadie les persigue por ser progresistas, sino por presuntos delitos y por mentira reiteradas, y sabe que ni el independentismo le perdonará sus mentiras ni los jueces les perdonarán sus delitos”, añadió.
Con todo ello, sentenció que el próximo Congreso Federal del PSOE “será el de su relevo” y le emplazó a “elegir entre unas o chantajes”. “Pero asúmalo, sobre la mentira y la corrupción es imposible construir nada, solo se construye sobre la confianza y el interés general y usted es incompatible con la confianza, con el interés general y con España”.
Por su parte, Sánchez dijo que el Gobierno legisla según las prioridades de los españoles, entre las que citó la consolidación del crecimiento económico y del empleo, el fortalecimiento de los servicios públicos, la vivienda, “combatir la desigualdad en todas las formas” y la lucha por la paz. “Y los datos están acompañando estas prioridades”, celebró antes de remarcar que ‘El Economist’ “acaba de situar España como la economía que mejor desempeño ha tenido en todo el mundo en el año 2024” y que la OCDE estima que España está “creciendo cuatro veces más” que la media europea, al tiempo que se está “rebajando la deuda pública y el déficit público”. “Estas son nuestras prioridades, a mí me gustaría saber, señor Feijóo, cuáles son las suyas”.
Pero la única idea de Sánchez era manifestar su despreció la intervención de Feijóo en sede parlamentaria y por ello se preguntó si esta es “la política para adultos” que prometió traer de Galicia.