Para el lehendakari, la conversación telefónica, que ha d*-urad-*o algo más de media hora, ha sido «franca y provechosa» tanto para el análisis del presente como del futuro, han señalado a Efe fuentes de la Presidencia vasca. Ayer martes Urkullu ya dejó claro que Vox condiciona «sí o sí» la política del PP y que los principios de la formación de Santiago Abascal «chocan radicalmente» con los suyos.
Explicó que en este tiempo previo al debate de investidura previsto para el 26 y 27 de septiembre la negociación «corresponde a los partidos» y «no a los presidentes autonómicos», aunque aclaró que nunca se negará «a hablar con Feijóo ni con nadie» «Vox cuestiona la Ertzaintza, Euskal Telebista, la Osakidetza, el euskera» y «todo lo que representa el autogobierno» y en política, añadió, «es necesario tener un mínimo de coherencia con los principios y, si lo tiene Vox o el PP, yo también lo tengo y soy abertzale, nacionalista, incluyente, abierto al mundo humanista y progresista en política social».
La conversación telefónica se enmarca dentro de la ronda de contactos que ha iniciado el líder del PP con los grupos y los presidentes autonómicos. Feijóo precisado este miércoles que no pidió a Urkullu una reunión presencial, sino hablar con él para ver si le puede aportar algo sobre las necesidades de las autonomías.