El estudio de la Universitat Politècnica de València, concluye que el 15 por ciento de su alumnado depende del vehículo privado para llegar al Campus de Vera. Hay más de 4.200 alumnos que viven a más de 60 minutos en transporte público, lo que les empuja a depender del coche, según el informe.
La UPV ha elaborado diferentes mapas que revelan los modos de transporte más eficientes y sus frecuencias, y los tiempos de desplazamiento medio, según el municipio de residencia. El estudio concluye que un aumento en la frecuencia y la mejora del servicio de Cercanías implicaría una mejor conectividad de unas 1.600 personas. Las poblaciones mejor conectadas son Alboraia, Almàssera, Meliana, Albuixech y Mislata, pero hay otras, como Catarroja, Buñol, Xirivella o Sagunt, con muchísimos problemas de conectividad. Mar Ortega, una de las investigadoras de este informe, habla de usuarios cautivos.
Según este trabajo, el 53% de la comunidad universitaria accede al campus de Vera en transporte público en menos de 30 minutos. En el lado opuesto, más de 4.200 personas viven a más de 60 minutos en transporte público del campus, lo que las empuja a depender del vehículo privado. Ortega afirma que, con una mejora de los Cercanías, este dato descendería.
El estudio, además, a partir de los datos facilitados por las empresas metropolitanas de transporte y la distribución de los distintos sectores de la población de la UPV, se han elaborado mapas que revelan los modos de transporte más eficientes y sus frecuencias, y los tiempos de desplazamiento medio al campus de Vera, según el municipio de residencia.
Fuentes del ministerio de Transportes, por su parte, añaden que el estudio parte de un supuesto que consideran falso ya que el Campus de Vera tiene dos líneas de Metrovalencia y varias de autobús pero no tiene Cercanías, por lo que no es culpa de esta red de transportes, según el departamento. Creen que es necesario mejorar las líneas que ya existen, que son de Metro y Bus. El Ministerio, por tanto, insiste en que estos problemas de movilidad son culpa de la Generalitat y del Ayuntamiento, que son los responsables del transporte público que llega al Campus.