Con la diferencia de que ellos no ven finalizado su contrato, sino que pasan a la ‘inactividad’. El pasado junio, la Seguridad Social registró un récord de 614.576 bajas por este motivo, es decir, una media de 27.935 por cada día laborable. El dato supera en un 48% al del mismo mes de hace un año, cuando se registraron 413.916 pases a la inactividad (18.814 al día). En términos interanuales los asalariados con este tipo de contratos se habían incrementado en junio un 25,4%, hasta los 1.038.938.
Esta no es la única causa por la que un fijo discontinuo es dado de baja de afiliación por su empresa, pero sí la principal. En junio se registraron un total de 33.332 bajas de afiliación por día laborable de estos trabajadores, es decir, unas 733.300 en el mes. El 83% se debe al pase a la inactividad. Es el mismo porcentaje que se da, entre los trabajadores temporales, con las bajas motivadas porque el contrato ha cumplido su duración estipulada.
Y de hecho, el pase a la inactividad de un fijo discontinuo es, por número de las registradas, la segunda causa de baja de afiliación de los asalariados españoles, por detrás solo de la finalización de un contrato temporal.
Pero esto no implica una caída equivalente de la afiliación media, ya que en el mismo periodo se registraron 26.467 altas diarias de fijos discontinuos, unas 582.274 en el total del mes. Eso sí, los datos de Seguridad Social no desglosan cuántas de estas altas se debieron a que estos trabajadores volvieron a ser llamados por sus empresas con el arranque del verano.
En cualquier caso, la estadística de la Seguridad Social que especifica las causas de las bajas de afiliación solo llega a hasta junio. No permite, por lo tanto, desglosar lo ocurrido en julio, cuando se perdieron 114.000 asalariados fijos discontinuos, reduciéndose hasta los 924.597 afiliados. Entre mayo y junio también retrocedieron, pero solo en 29.842.