La presidenta de la Comisión Europea, von der Leyen, ha retirado este martes la propuesta para reducir el uso de pesticidas, herbicidas e insecticidas químicos que se usan en la UE hasta 2030. El Ejecutivo comunitario propuso reducir los riesgos de los productos químicos utilizados en la agricultura, sin embargo, tal propuesta se ha «convertido en un símbolo de polarización», ha indicado la alemana en el pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo este martes. Tras el rechazo en el Eurocámara y la falta de avances entre los Veintisiete Estados miembro, Von der Leyen ha anunciado que propondrá al Colegio de Comisarios retirar esta propuesta. Sin embargo, el tema, y la visión tras él, se mantendrá.
«Para avanzar, es necesario más diálogo y una nueva perspectiva», ha juzgado la jefa de la Comisión Europea. La idea es, no obstante, que el Ejecutivo comunitario haga una nueva propuesta con un contenido más «maduro» y con la «participación de las partes implicadas», ha aclarado Von der Leyen. Es decir, implicar al sector agrícola en la elaboración de esta normativa para que incluya objetivos vinculantes y realistas que no susciten recelo.
La propuesta de Bruselas planteaba reducir un 50% el uso de pesticidas químicos y el uso de pesticidas más peligrosos hasta 2030. La medida, que fue rechazada por el sector agrícola, había encallado en su proceso legislativo en las instituciones comunitarias. Si los Veintisiete criticaban la falta de una evaluación de impacto considerando los efectos de la guerra de Ucrania sobre productos como los fertilizantes, el pleno de la Eurocámara, con mayoría de conservadores, manifestó su rechazo.
La presidenta de la Comisión Europea, que se reunió el pasado jueves con la agrupación de cooperativas agrícolas europeas Copa-Cogeca, ha considerado que el sector agrícola comunitario necesita una perspectiva a largo plazo. «Es cierto que deben ser remunerados de forma justa», ha indicado Von der Leyen que ha recordado que la Política Agraria Común cuenta con un amplio apoyo del presupuesto de la UE. «El dinero es importante pero no lo es todo, los recursos naturales sanos son también clave para mantener altos rendimientos y suelos fértiles». De hecho, entre el 60 % y el 70 % de los suelos de la UE están actualmente en malas condiciones, ha puntualizado.
La jefa del Ejecutivo comunitario ha considerado que la protección de naturaleza debe ofrecer incentivos «generosos» y que los agricultores necesitan incentivos «convincentes» para mejorar las condiciones del entorno natural. «Las ayudas públicas pueden ayudar a establecer tales incentivos», ha indicado y puso por ejemplo el etiquetado premium. En todo caso, su perspectiva se apoya en que la conservación de la naturaleza solo puede tener éxito a través de alicientes económicos: «solo si nuestros agricultores pueden vivir de sus tierras invertirán en ella en el futuro».
«Nuestro sistema de producción alimentaria es único», ha alabado la presidenta del Ejecutivo comunitario, tras contextualizar que los agricultores de toda la UE han salido a la calle y que son el primer eslabón de la cadena al que afecta el cambio climático. A ello se suman las consecuencias de la guerra de Ucrania, como la inflación, el alza de coste de la energía o el coste de los fertilizantes.
En un intento por escuchar las demandas de los agricultores y por configurar el futuro del sector agrícola, Von der Leyen ha defendido que esta industria debe llegar a una fórmula de producción más sostenible para que, en los próximos años, siga siendo rentable. A través del diálogo por el futuro de la agricultura, la alemana pretende conversar con una amplia representación del sector de la industria alimentaria, a la de fertilizantes y el sector financiero.
Tras estas negociaciones la Comisión Europea presentará un informe a finales de verano que reflejará los resultados de estas conversaciones, que luego que llevarán al Parlamento Europeo y a la conversación con los Estados miembro, según ha aclarado la presidenta de la Comisión Europea. «Formarán los fundamentos del futuro de nuestra política agrícola», ha agregado. Cabe recordar que la actual legislatura concluirá con las elecciones al Parlamento Europeo entre el 6 y el 9 de junio.
La idea tras este movimiento de la alemana es aplacar los ánimos, intentar aliviar las tensiones de un debate polarizado y crear confianza en el sector. Europa, ha dicho Von der Leyen, tiene producción alimentaria «más sana» y de «mayor calidad» del mundo gracias a los agricultores. Y con la vista puesta en la propuesta que la Comisión Europea presentará este martes para reducir un 90% las emisiones de gases de efecto invernadero hasta 2040, respecto a los niveles de 1990, la presidenta del Ejecutivo comunitario aboga por una agricultura más sostenible en una suerte de transición sensible con el sector.
Las empresas de fitosanitarios, agrupadas en AEPLA, se han congratulado de la retirada de las restricciones a las denominadas medicinas de las plantas. «Siempre hemos considerado que la propuesta de Reglamento de Uso Sostenible establecía unos objetivos de reducción basados en criterios cuantitativos y una definición de zonas sensibles que hubieran comprometido gravemente la producción agrícola en Europa y en España», afirman en un comunicado.
Para Aepla, «afortunadamente los legisladores europeos han sido conscientes de la necesidad de no limitar la producción a nivel europeo comprometiendo su futuro y por esto afortunadamente, el Parlamento Europeo votó en contra de la propuesta y hoy hemos recibido la noticia de la retirada de la propuesta por la Presidenta de la CE. Confiamos que tras las elecciones al PE, la nueva Comisión Europea, trabaje una nueva propuesta elaborada con criterios más racionales y que favorezca la introducción de la tecnología y la innovación que tanto necesita la agricultura europea y española».