La reunión, celebrada en la residencia del primer ministro neerlandés, Mark Rutte, reunió también a von der Leyen y Costa, que trabajaron junto a Zelensky para ajustar un documento que consideran demasiado influido por las propuestas del equipo del presidente estadounidense, Trump, y con concesiones que podrían favorecer a Rusia.
Fuentes europeas explican que la intención es ‘equilibrar’ el marco negociador y reforzar los intereses de Ucrania y de la UE ante un momento clave del conflicto. En paralelo, Elon Musk ha intensificado su ofensiva contra las instituciones europeas con una cadena de mensajes en su red social, donde acusa a la UE de ser una “burocracia tiránica y no elegida”.
Según el medio estadounidense Axios, la Administración Trump interpreta la gira diplomática de Zelensky por Europa como un intento de ganar tiempo. Antes de viajar a Bruselas, Zelenski se reunió en Londres con los líderes europeos: Starmer, Macron y Merz , los principales aliados de Ucrania. Todos expresaron su respaldo al presidente ucraniano. Los líderes europeos coincidieron en la necesidad de combinar el esfuerzo de Europa con el apoyo estadounidense: la intención es que el plan final cuente con garantías de seguridad adecuadas, instrumentos de reconstrucción y financiamiento, incluyendo la posible utilización de activos rusos congelados en Europa.
La cuestión territorial sigue siendo el punto más delicado. Anoche, Zelensky fue tajante al asegurar que “Ucrania no tiene derecho legal ni moral a ceder territorio”, recordando que la Constitución lo prohíbe. Hoy continúa su agenda en Roma, donde se reunirá con el Papa León XIV y, con Meloni. Según la prensa italiana, Meloni buscará promover un enfoque pragmático: mantener las fronteras actuales y negociar a partir de ahí.

