La medida se incluye en la nueva partida de 2.520 millones de euros para repartir en forma de becas a un millón de estudiantes, que aprobará el Consejo de Ministros este martes y que será la mayor partida histórica que se ha destinado a este tipo de políticas educativas en España.
En su discurso de inauguración de la Conferencia Internacional de Energías Renovables en España (SPIREC), Sánchez ha asegurado que el Ejecutivo prevé crear hasta 20.000 plazas vinculadas a este tipo de estudios en el tiempo. En este sentido, ha subrayado que el sector de las renovables tienen potencial para generar hasta 468.000 empleos en España durante la próxima década si se continúa con la «apuesta decidida» por las energías ‘verdes’ que se está realizando, «en particular por la fotovoltaica». Esto supondría multiplicar casi por cinco los alrededor de 111.000 puestos de trabajo que concentraba esta actividad industrial en 2021.
El objetivo de esta partida para becas es, según ha explicado Sánchez, «impulsar la igualdad de oportunidades y fomentar la empleabilidad de los jóvenes» con trabajos vinculados a la transición ‘verde’. Sánchez también ha hecho referencia al informe Energy Technology Perspectives 2023, elaborado por la Agencia Internacional de la Energía (AIE), en el que se pone de manifiesto que los puestos de trabajo relacionados con la fabricación de energía limpia se pueden duplicar para 2030, pasando de los seis millones actuales a casi 14 millones.
Paneles para todos
Bajo este contexto, España se ha lanzado a liderar un proyecto de interés comunitario (IPCEI) de fabricación de paneles solares en Europa. La Unión Española Fotovoltaica (UNEF) calcula que se pueden desplegar 20.000 millones de euros de inversión pública y privada solo en energía solar hasta 2030. «España tiene ya las capacidades para fabricar el 90% de los componentes para un proyecto eólico y el 65% para un proyecto fotovoltaico», ha apuntado Sánchez.
Por su parte, también ha aprovechado la ocasión para poner en valor el trabajo del Ejecutivo en materia energética, como la implementación del mecanismo ibérico para topar el gas para la producción de electricidad (con casi 5.000 millones de ahorro) o que el 42% de la demanda de electricidad en 2022 fue cubierta con energías renovables. En esta línea, ha calificado a España como un «faro» en el debate en materia energética en la actualidad y ha puesto en valor el trabajo de la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, en el marco de la Unión Europea.
Asimismo, ha defendido las políticas en materia energética del Gobierno en el contexto de la crisis desatada tras la invasión de Rusia a Ucrania y ha afeado a la oposición que en este escenario se propusiese «posponer las transición» hasta superar esta situación geopolítica. «España no está en esa línea. Todas las respuestas están alineadas con la emergencia climática, con avanzar en la transición verde», ha remarcado.