Sus ansias de correrías y su espíritu emprendedor fueron clave para la creación de Cillero & De Motta, una boutique de ‘alta costura’ donde el traje a medida, no se hace con tafetán ni seda ni tejidos, sino con teclados, glosarios, libros y palabras. Y con gastronomía, una gran pasión, desde siempre, para él.
Este 2023, Cillero & De Motta cumple 25 años. El mismo espíritu con el que empezó le ha llevado a no cejar en el empeño de hacer de Cillero & De Motta cada día una opción mejor. Con más vocación de servicio y con mejor calidad lingüística final.
En su primera juventud, Enrique era del tipo escritor en ciernes. Se rodeaba de escritores y poetas. En 1992 ganó el Concurso de Poesía de la Universidad de Zaragoza. Le dieron 186.000 pesetas de entonces, que estaba muy bien. Sacudidas las ganas de trascender con un arte del que te cuesta vivir 30 años, se ganaba la nómina impartiendo clases de inglés en un instituto de FP en un barrio obrero de Zaragoza. Pero, esa vida no era para él, se le quedaba pequeña y no se adaptaba bien a la rutina y peor a la charla de la sala de profesores: “Lo que realmente quería era vivir una aventura”, sostiene. Hizo un curso de Creación de Empresas de los que subvencionaba el IAF en los 90, impartido por la EOI, y hasta hoy.
Inglés y gastronomía ha sido su divisa, su binomio, y así nació Cillero & De Motta que, en sus orígenes, traducía documentos corporativos, informes de despachos de arquitectos y cartas de restaurantes. La gastronomía era (es) la afición que le contagió su madre. “Cuando acabé la carrera me compré la guía Gourmetour y recorrí España con un R5 blanco de segunda mano. A los 25 años había estado en Arzak, en Berasategui -4.000 pesetas de 1986 costaba cenar en el Bodegón Alejandro-, en Les Prés d’Eugénie de Michel Guérard, en Elkano… Comprendí que ese bagaje había que aprovecharlo y que el liderazgo de España en gastronomía tenía que llegar, antes o después”.
De la época de los inicios – en 1998 se firmó la Escritura de Constitución de la sociedad- de Cillero & De Motta le recuerda bien el pintor aragonés Pepe Cerdá. “Siempre tuvo una vena muy creativa. Y la traducción de las palabras necesita mucha creatividad. Traducir es interpretar y Enrique supo hacerlo como nadie. Su gran logro es haberse convertido en el empresario que es, sabiendo conjugar a la perfección una enorme creación con una gran rentabilidad”. Cerdá pintor genial y bibliófilo, fue, en su momento, autor del primer logo de la empresa de traducción y es amigo personal de la casa.
En 2003 comenzaron a trabajar con originales de elBulli. “Nos contactó Gourmand, que entonces había firmado la distribución internacional de los libros de elBulli, para que tradujéramos uno de los libros más curiosos y complicados que habíamos hecho nunca: “Texte et Prétexte en Textures” de Óscar Caballero. Una historia de elBulli, desde la prehistoria, antes de que Juli fichara a Ferran, llena de juegos de palabras imposibles. Así conocimos a Juli Soler – una gran i, para Enrique y para el proyecto- y elBulli que llegaría a ser la vanguardia mundial en cocina. Con Juli firmamos las primeras ediciones de elBulliBooks que se publicaron en inglés, francés, alemán, italiano y japonés.
Óscar Caballero, un “criador de catalanes en París”, como a él le gusta decir, al que Juli llamaba a veces para probar el menú, sigue escribiendo libros sobre gastronomía, e historia de la cocina y es autor también de la biografía sobre Juli Soler que publicó Planeta Gastro. Sobre Cillero dice lo siguiente: “Enrique es un entusiasta profesional. Si le gusta un libro lo compra y te lo envía. Si descubre un restaurante, le urge llevarte. Y porque le gusta conversar, y las lenguas, decidió que se ganaría la vida haciendo universales libros concebidos en una sola. Enrique ha fabricado su propia Babel, en apenas un cuarto de siglo, sin dejar de comer, beber, hablar y leer. Por eso, con Enrique, podemos hablar de lo que hacemos sin llamarlo trabajo nunca”.
Desde hace ya 25 años, Cillero & De Motta, Enrique G. Cillero y Elena A de Motta, su socia en esta aventura y madre de sus dos hijos, son los guardianes de las palabras bullinianas. “Todos los volúmenes de elBulli, la Bullipedia o los títulos de elBulliFoundation los traducimos y editamos nosotros. En inglés, francés, alemán, italiano y japonés”, afirma Enrique. Por poner una cifra, Cillero & de Motta factura hoy más de 100.000 euros al año a cada uno de sus principales clientes; 5 multinacionales españolas y editores internacionales.
Sobre esta boutique de ‘alta costura’ en traducción y edición, Ferran Adrià tiene una opinión muy clara: “Desde el primer momento, supimos que Enrique Cillero y su maravilloso equipo de Cillero & De Motta serían aliados perfectos para emprender un largo camino editorial que más de veinte años después sigue dando sus frutos. Su trabajo de revisión y traducción se basa en la calidad, pero también en una profunda conexión con nuestra manera de pensar y transmitir conocimiento”.
Cómo se trabaja en Cillero & De Motta
Hoy son un equipo de siete editores y gestores de proyecto, además de 25 trabajadores indirectos, traductores freelance que, en muchos casos, trabajan para la empresa desde sus orígenes, y que cada año revisan y traducen más de 16 millones de palabras. Además, editan y entregan los títulos ya maquetados, listos para imprimir. Y a veces, el libro físico. Una idea interesante y que les hace ser muy competitivos es que trasvasan los procesos editoriales a cuentas corporativas. Por ejemplo, en la traducción y revisión de Cuentas Anuales e Informes corporativos de RSC.
Trabajan con tecnología punta y con herramientas de traducción propias. “Obviamente utilizamos toda la tecnología disponible en el mercado. La Inteligencia Artificial la sentimos como una aliada. En nuestro sector, o evolucionas o estás fuera. Nosotros evolucionamos con los tiempos y seguimos poniendo el mismo cuidado en todo, algo que nos caracteriza desde el principio”, afirma Elena Aranaz, Quality Manager de Cillero & De Motta. La obsesión diaria es el cuidado de las palabras: lo involucrados con el cliente que son y el cariño que ponen el equipo en los proyectos es uno de los grandes valores de la empresa. Además, Elena destaca: “La clave de nuestro éxito y buen posicionamiento está en que nosotros editamos, no nos ceñimos a la traducción y listo. Además, Enrique viaja más de 120 días al año visitando clientes y difundiendo nuestro trabajo, este tipo de trabajo es clave”. Hoy el proyecto vende en Reino Unido, Estados Unidos, Francia, Holanda y Alemania.
De media, cada proyecto tarda dos meses en salir adelante; los más complejos pueden tardar hasta seis. Traducen entre 75-100 títulos al año para editoriales internacionales, y son líderes en traducción y edición de libros y contenidos gastronómicos en Europa.
Cillero & De Motta son sus clientes
Editoriales líderes en sus mercados en edición gastronómica como Phaidon, Hachette, Assouline, Planeta Gastro, RBA o The Cooking Lab, y algunas más que no quieren salir en la lista, se encuentran entre sus principales clientes. Volúmenes como los antes mencionados de elBulli, títulos de elBulli Foundation, Modernist Cuisine, Modernist Bread, Modernist Pizza, o los libros de Disfrutar se cuentan entre sus numerosas incursiones culinarias. También la traducción de los contenidos de Alain Ducasse Education llevan su sello.
La acumulación de títulos de cocina y arte no les impide ser especialistas en otras disciplinas. Diez multinacionales españolas del sector energético y de la moda confían año a año en Cillero & de Motta para la traducción de sus Cuentas Anuales, tiendas online, y documentos sensibles de estrategia empresarial. Una tipología que se mueve entre la filosofía, la cultura y la economía, que le viene genial al equipo.
Trabajan para museos como la Fundación Thyssen, el MAN, el museo Goya, Patrimonio Nacional, La Alhambra… También colaboran con las más reputadas escuelas de negocios de España, y mantienen convenios de colaboración con universidades de prestigio del Reino Unido, Francia y España.
La formación de Enrique G. Cillero a lo largo de los años ha sido fundamental para sacar adelante una empresa sólida y para moverse como pez en el agua en distintos ambientes internacionales encajando con un variado crisol de clientes y colaboradores. Enrique es licenciado en Filología Inglesa, diplomado en Filología Hispánica, Certificado Superior en Estudios Franceses y Executive MBA por ESADE.