El barril Brent, de referencia en Europa, baja un 4,24%, hasta los 73,83 dólares, mientras que el barril West Texas, de referencia en EEUU, cae un 4,60%, hasta los 69,19 dólares.
Este jueves hasta cuatro bancos centrales han acometido distintas alzas en los tipos. La sorpresa la ha dado el Banco de Inglaterra (BoE), ha optado por una subida de 50 puntos básicos, hasta el 5%, para hacer frente a la persistente inflación.
El Banco Nacional de Suiza (SNB), también ha elevado el precio del dinero 25 puntos básicos, hasta el 1,75% desde el 1,5%, en línea con lo esperado. Además, el Banco de Noruega (Norges Bank) ha subido las tasas en 50 puntos básicos, hasta el 3,75% desde el 3,25%, y ha señalado que su «evaluación actual sobre las perspectivas y balance de riesgos implica que es probable» una nueva subida de tipos «en agosto». El Banco Central de Turquía, por su parte, ha incrementado tipos por primera vez desde marzo de 2021 hasta el 15% desde el 8,5%.
A todo ello, hay que añadirle, que el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, ha reiterado ante el Comité Bancario del Senado su mensaje sobre la necesidad de seguir elevando las tasas y, en esta ocasión, ha adelantado que lo más probable es que se produzcan dos nuevas subidas de tipos este año.
«Con los bancos centrales cada vez más decididos a presionar a la baja la inflación, incluso si eso significa forzar una recesión, los precios del petróleo han reaccionado en consecuencia, cayendo bruscamente desde los máximos de una semana de ayer», explica Michael Hewson, analista jefe de mercado en CMC Markets. En este sentido, el experto destaca que «los aumentos de tasas mayores de lo esperado por parte del Banco de Inglaterra y el Banco de Noruega y una Reserva Federal que ha seguido impulsando una orientación agresiva está pesando sobre las expectativas de demanda».