En el momento actual, el 35% de las familias que viven de alquiler destinan más del 40 % de su renta neta, y el objetivo que se han marcado desde Solventis es que puedan dedicar un máximo del 30%. Según explica la compañía, con este modelo la administración no realiza ninguna inversión, sino que gestiona el alquiler de las viviendas por un periodo no inferior a 30 años a cambio de un canon fijo anual en concepto de pago por disponibilidad al vehículo de inversión.
En este sentido, la administración asume los costes y riesgos de gestión con los inquilinos (morosidad, posible desocupación, etc.) y pasado ese periodo la infraestructura pasa a ser de titularidad pública.
Solventis asegura que los inversores obtendrán una rentabilidad neta anual superior al 7%, asumiendo el riesgo de edificación de los inmuebles, y señala que con este modelo se generan viviendas asequibles en todo el país gracias a un sistema flexible, ya que cada administración local, al gestionar la infraestructura, podrá adaptar las políticas locales de vivienda a las necesidades cambiantes de esa población.