Con variedad de propuestas e infinitas posibilidades, la comida nipona ha sabido adaptarse a los gustos occidentales, incluyendo con cautela parte de su esencia histórica al mismo tiempo que recogen las ideas de otras culturas. Tottori es un viaje hasta la cultura culinaria asiática más tradicional, en la que adentrarse de lleno en sus sabores más puros y representativos. El detalle, el perfecto dominio de la técnica y el conocimiento profundo del pescado hacen que con cada elaboración Sushi Bar Tottori nos cuente un pedacito de la historia del restaurante y de todos los que lo conforman.
Su recetario está marcado por los sabores más puros y las materias primas de máxima calidad cocinadas en la robata, la auténtica parrilla japonesa, como su pepino de mar a la robata. Los beneficios de este producto y el excelente emplatado para este producto invitan a conocer el sabor único de esta elaboración. Es rico en nutrientes y proteínas, mientras que es bajo en calorías y grasas, por lo que puede ser esencial para las personas que quieren perder peso o estabilizar sus niveles de azúcar en sangre. Sus propiedades antioxidantes ayudan a disminuir la inflamación del cuerpo y a controlar la presión arterial o mejorar la salud del corazón y los huesos.
Este excepcional producto se puede consumir fresco, pero lo más habitual en la comida japonesa es llevar a cabo un proceso de desecación para después agregarlo a diferentes elaboraciones. El pepino de mar no tiene un sabor en particular, por lo que dependerá de los condimentos en su receta. Así, el restaurante nipón Tottori ofrece el producto siguiendo la técnica de la robata, al tratarse de una de las formas más comunes de preparar el pepino de mar en la gastronomía japonesa.
Esta técnica milenaria se caracteriza por emplear el fuego en una parrilla de carbón para cocinar carnes y pescados en el momento. La esencia de esta técnica reside en la capacidad de alcanzar altas temperaturas sin apenas producir llamas, por lo que se trata con minucioso cuidado el producto. De esta manera, en las cocinas del Sushi Bar Tottori, el pepino de mar sólo recibe una vuelta durante la elaboración, logrando que el alimento mantenga un interior jugoso y un exterior inigualable dorado y ligeramente caramelizado.