Biden se ha reunido con el presidente ucraniano, Zelenski «para reafirmar nuestro inquebrantable compromiso con la democracia en Ucrania, su soberanía y su integridad territorial», como ha declarado a través de Twitter, donde también ha asegurado que durante el último año «Estados Unidos ha creado una coalición de naciones del Atlántico y el Pacífico» que buscan ayudar a Ucrania con «apoyo militar, económico y humanitario sin precedentes».
Por su parte, Zelenski ve la visita como una «muestra extremadamente importante de su apoyo a todos los ucranianos», gracias a la que «podemos y debemos hacer este año 2023 el año de la victoria». El jefe de la Oficina de la Presidencia de Ucrania, Yermak, también ha valorado la visita como «histórica y estratégica» y ha asegurado que ayudará al objetivo común, que es «la victoria de Ucrania sobre Rusia». Además, el presidente ucraniano ha recordado que «la primera llamada de apoyo a Ucrania llegó desde la Casa Blanca». Además de para mostrar su apoyo, el presidente estadounidense ha aprovechado su visita para anunciar un nuevo paquete de ayudas al país, entre las que se encuentran 500 millones de dólares adicionales, armas de largo alcance y armamento que «no se ha suministrado antes». Tras esto, ha afirmado que la semana que viene anunciará «sanciones adicionales» para todas aquellas compañías que ayudan a Rusia en la guerra.
Hasta el momento, Estados Unidos ha ayudado a Ucrania con el envío de apoyo militar y financiero con un valor superior a los 30.000 millones de dólares. También ha presionado a sus socios de la OTAN para que envíen más armamento al país, como fue el caso de los tanques Leopard 2.
Biden no va a ser el único dirigente en visitar la capital ucraniana en las próximas horas. La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, también tiene planeado aterrizar en Ucrania en estos días como señal de apoyo.