Según el documento del supervisor, el 70% de la población había estado ahorrando durante los últimos doce meses a finales de 2021, una cifra que es 9 puntos porcentuales superior a la registrada en 2016, cuando un 61% de la población había logrado guardar una parte de sus ingresos. Y de ellos, el 68% se ha decantado por hacerlo a través de cuentas corrientes, lo que supone un incremento de 5 puntos con respecto a 2016.
Sin embargo, un 40% de los encuestados también admite haberlo hecho fuera del sistema financiero, metálico, lo que supone una mejora de dos puntos porcentuales con respecto a hace cinco años. En esta forma de economizar tiene mucho que decir los años: a mayor edad menor es este porcentaje. De esta manera serían los jóvenes el grupo de edad que más dinero guarda ‘bajo el colchón’. De hecho, un 60% de los encuestados entre una edad de 18 a 34 años de los que han logrado ahorrar lo han hecho en metálico, mientras que esta cifra se reduce a un 22% entre los individuos de 65 a 79 años.
No obstante, para el grupo de edad comprendido entre los 35 y los 44 años este porcentaje cae hasta el 41%, mientras que los comprendidos entre los 45 y los 54 años representa un 33%. Fuentes financieras explican que estos grupos de edad guardan una parte de sus ahorros en metálico ante posibles imprevistos, mientras que los primeros, pese al uso generalizado de nuevas tecnologías y aplicaciones bancarias entre ellos, se debe a que no cuentan con ingresos periódicos domiciliados, por ejemplo, procedentes de un salario.
En cuanto al ahorro en cuentas corrientes, dos terceras partes de los españoles se han decantado por estos productos independientemente del grupo de edad, si bien el porcentaje llega al 72% entre los mayores de 65 años. En cuanto al nivel educativo, en torno al 62% de los individuos con bachillerato o menos que han ahorrado lo han hecho en una cuenta corriente, frente al 77% de quienes tienen educación universitaria o equivalente.
Los fondos de pensiones también se han utilizado como vehículo para ahorrar. Sin embargo, este ahorro en estos productos también está condicionado por la edad, especialmente si se tiene en cuenta que es un producto por el que se decantan cuánto más cerca se esté de la edad de jubilación. Así, el porcentaje que ha ahorrado en planes de pensiones aumenta desde un 3% entre los individuos de 18 a 34 años hasta un 21% entre los de 55 a 64 años.
Además de la edad, también es determinante tanto el nivel de renta como el educativo, puesto que alcanza un 4% entre quienes tienen educación inferior a bachillerato y un 18% entre quienes tienen estudios universitarios o equivalentes. Del mismo modo, un 3% de los individuos pertenecientes a hogares con ingresos inferiores a 15.000 euros que ha ahorrado lo ha hecho en planes de pensiones, un porcentaje que aumenta hasta el 22% entre los individuos que viven en hogares con ingresos superiores a 47.000 euros.
Otro vehículo importante de ahorro son los fondos de inversión, cuyo uso para canalizar ahorros también aumenta con la edad hasta los 64 años (desde un 6% entre los menores de 34 años hasta un 12% en el grupo de entre 55 y 64 años). Asimismo, el porcentaje de quienes han ahorrado en fondos de inversión es más alto para los hombres (10%) que para las mujeres (7%), y crece con el nivel educativo.
Así, un 3% de quienes tienen educación inferior a bachillerato y ahorraron utilizaron para ello los fondos de inversión, el porcentaje aumenta al 7% entre quienes tienen el título de bachillerato y alcanza el 14%