El índice de las hipotecas se situará en torno al 3,68% en su media mensual, a falta del dato de este viernes que determinará la milésima que falta. El promedio será 66 puntos básicos superior al de diciembre de 2022 (3,018%) y, por tanto, encarecerá la mayoría de préstamos con revisión anual, pero tiene también su lado positivo. Es la menor subida anual desde abril de 2022, justo desde que el Euríbor cambió de signo negativo a positivo, pero además se produce con la mayor rebaja mensual desde febrero de 2009 (-34 puntos básicos). Dicho de otra manera, el Euríbor ha bajado al ritmo más rápido en casi 15 años en estas últimas semanas.
Con las proyecciones actuales, el Euríbor apunta a la baja en su entrada en 2024 después del descenso registrado desde finales de noviembre. Solo ha subido en 4 de las últimas 21 sesiones hábiles. Los últimos datos diarios sitúan al indicador en el 3,53% (jueves 28 de diciembre), una cifra inferior al promedio de marzo de 2023 (3,647%) y similar al de febrero (3,534%). Por tanto, si no cambia la tendencia, el primer abaratamiento generalizado podría tener lugar en las hipotecas que se revisen en esos dos meses, antes de lo anticipado por el sector.