Así, el precio medio del litro de gasolina ha finalizado esta primera semana del año con una racha de 13 descensos seguidos después de encarecerse un 0,19%. Se ha situado en los 1,534 euros el litro, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea. Llenar un depósito de gasolina cuesta ahora una media de 84 euros , casi tres euros más que en las mismas fechas del año pasado, cuando ascendía a unos 81,4 euros, cuando ya no existía el descuento de 20 céntimos por litro que estuvo vigente en gran parte de 2022.
Por su parte, el diésel pone fin a doce semanas seguidas en caída tras subir un 0,07% con respecto a la semana anterior, hasta los 1,493 euros el precio medio del litro, con lo que llenar un depósito medio supone una media de 82 euros, unos 8 euros más que en el mismo período de 2023, momento en el que le precio era de 74 euros.
De esta forma, ambos carburantes cortan una espiral bajista que les había llevado a acumular un descenso en el precio de casi el 15%, en el caso de la gasolina, y de más del 13%, para el diésel.
A pesar de este ligero repunte, el precio del litro de gasolina se mantiene por debajo de los niveles en los que se situaba antes del estallido de la invasión rusa de Ucrania -1,592 euros por litro-, que comenzó el 24 de febrero de 2022. En el caso del gasóleo sigue por encima del precio de entonces -1,479 euros por litro-. Además, ambos carburantes continúan lejos de los máximos que registraron el verano de 2022, en julio, cuando la gasolina alcanzó los 2,141 euros y el gasóleo los 2,1 euros.
El diésel suma 45 semanas seguidas por debajo del precio de la gasolina. Se mantiene así en la situación habitual anterior a la invasión rusa de Ucrania, que provocó que el precio del gasoil fuese más caro que el de la gasolina de forma continuada desde agosto de 2022 hasta mediados de febrero de 2023, cuando se rompió la dinámica.