Según ha señalado el suizo SNB, «la flexibilización de la política monetaria ha sido posible gracias a que la lucha contra la inflación durante los últimos dos años y medio ha sido eficaz. Desde hace algunos meses, la inflación ha vuelto a situarse por debajo del 2% y, por tanto, en el rango que el SNB equipara con la estabilidad de precios. Según las nuevas previsiones, es probable que la inflación también se mantenga en este rango durante los próximos años», ha explicado el organismo monetario en un comunicado.
«Con su decisión, el SNB tiene en cuenta la reducción de la presión inflacionaria, así como la apreciación del franco suizo en términos reales durante el año pasado. El recorte de la tasa de interés oficial también respalda la actividad económica. La flexibilización de hoy garantiza así que las condiciones monetarias sigan siendo apropiadas», ha añadido el banco central helvético. En este sentido, el SNB ha indicado que «seguirá de cerca la evolución de la inflación y ajustará su política monetaria nuevamente si es necesario para garantizar que la inflación se mantenga dentro del rango compatible con la estabilidad de precios a medio plazo».
La entidad ha destacado que la inflación en Suiza se situó en el 1,2% en febrero y que la previsión para el IPC es que se sitúe en el 1,4% durante 2024, en el 1,2% en 2025 y en el 1,1% en 2026, asumiendo que los tipos de interés se mantienen en el 1,5% actual durante los tres ejercicios.
El SNB ha explicado que «tras haber disminuido rápidamente en muchos países en 2023, la inflación ha bajado a un ritmo algo más lento en los últimos meses» y «en muchos países sigue por encima de los objetivos de los bancos centrales. En este contexto, muchos bancos centrales han dejado sin cambios su política monetaria restrictiva por el momento».
Por ello, considera «probable que el crecimiento económico mundial siga siendo moderado en los próximos trimestres», y que «la inflación siga disminuyendo, sobre todo debido a la política monetaria restrictiva».
No obstante, el SNB ha señalado que «este escenario para la economía global todavía está sujeto a riesgos importantes». Porque «la inflación podría permanecer elevada durante más tiempo en algunos países, lo que requeriría una política monetaria más estricta de lo esperado en el escenario base. Del mismo modo, las tensiones geopolíticas podrían aumentar. Por lo tanto, no se puede descartar que la actividad económica mundial sea más débil de lo que se supone».
Sobre la economía suiza, el SNB ha considerado «probable que el crecimiento siga siendo modesto en los próximos trimestres». Sobre todo porque «la débil demanda exterior y la apreciación del franco suizo en términos reales durante el año pasado están teniendo un efecto desalentador». «En general», ha pronosticado el organismo, «es probable que el PIB de Suiza crezca alrededor del 1% este año. En este entorno, es probable que el desempleo siga aumentando gradualmente y que la utilización de la capacidad de producción disminuya algo más».Por último, el SNB ha precisado que «nuestras previsiones para Suiza, al igual que para la economía mundial, están sujetas a una incertidumbre significativa», ya que «el principal riesgo es una actividad económica más débil en el exterior».
Poe su parte, el Riksbank ha decidido mantener los tipos de interés en el 4%, en línea con lo esperado. Sin embargo, el banco central de Suecia ha abierto la puerta a un recorte en mayo o junio si las perspectivas de inflación siguen siendo favorables. «La inflación está en proceso de estabilizarse en el objetivo, pero las presiones inflacionarias todavía son algo elevadas. Por lo tanto, el Comité Ejecutivo ha decidido dejar el tipo de interés oficial sin cambios en el 4%», señala el organismo en un comunicado. «Si las perspectivas de inflación siguen siendo favorables, es muy posible que se reduzca la tasa de política en mayo o junio», añade el Riksbank.
En el texto se destaca que existen riesgos que podrían provocar que las presiones inflacionarias vuelvan a aumentar. Entre ellos se incluyen «nuevos shocks de oferta a raíz de los disturbios geopolíticos, el continuo debilitamiento de la corona o el comportamiento de los precios de las empresas que no se normaliza como se esperaba».