Esta evolución es debida, principalmente, a la subida de los precios del gas, frente a la bajada de abril de 2023, y al aumento de los precios de la alimentación, mayor que el del año pasado. También, aunque en menor medida, a la electricidad, cuyos precios bajan, pero menos que en el mismo mes del año anterior.
En sentido contrario destaca la bajada de los precios de ocio y cultura, que subieron en abril de 2023.
La tasa de variación anual estimada de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) disminuye cuatro décimas, hasta el 2,9%.
Los precios de consumo registran en abril una tasa del 0,7% respecto al mes de marzo, según el indicador adelantado del IPC. En el mes de abril la tasa de variación anual estimada del IPCA se sitúa en el 3,4%, una décima por encima de la registrada el mes anterior.
Por su parte, la variación mensual estimada del IPCA es del 0,6%