«El IVA del aceite de oliva desde el 1 de julio pasará a un 0% hasta el 30 de septiembre y después se situará en el 2% hasta el 31 de diciembre», ha expresado la ministra de Hacienda, Montero, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. A partir de 2025, la cesta de alimentos básicos tendrá un tipo de IVA superreducido del 4%, en lugar del 10% que le correspondería. Para Montero, la inclusión del aceite de oliva en la lista de productos básicos es una decisión «que reconoce la importancia del aceite de oliva en la dieta mediterránea, en la dieta saludable, para potenciar también a este mercado que ha tenido muchas dificultades en los últimos años fundamentalmente derivadas de la situación de sequía y en donde debemos desde luego cuidar este mercado y este producto como uno de nuestros bienes más preciados».
Por su parte, el IVA de las pastas y los aceites de semilla se mantendrá en el 5% hasta el 30 de septiembre para después tributar al 7,5% hasta final de año.
En mayo, la inflación escaló tres décimas, con lo que el Índice de Precios de Consumo (IPC) se situó en el 3,6%. En esta tasa, los alimentos y bebidas no alcohólicas destacaron por su influencia negativa, pues los precios disminuyeron tres décimas, hasta el 4,4%. Este descenso se debió, en su mayor parte, a los incrementos de los precios de las frutas y la carne, menores que en el mismo mes de 2023, así como a la bajada de los precios de los aceites y grasas, frente a la subida en mayo del año anterior.
Según la ministra de Hacienda, la «mayor rebaja de impuestos» de la historia ha permitido ahorrar 25.000 millones de euros, mientras que las medidas fiscales que afectan al IVA y el IRPF permitirán ahorrar a las familias 3.000 millones de euros al año.