Así lo ha acordado la decana de los juzgados madrileños, la magistrada del Barco, en un acuerdo gubernativo en el que accede a la petición efectuada por María Marcos Salvador, directora del Departamento de Seguridad de Presidencia del Gobierno, que el pasado lunes solicitó a la decana que pudiese entrar en la sede judicial por la puerta trasera, evitando así el «paseíllo» ante los numerosos medios de comunicación que se espera se concentren para su comparecencia.
En la resolución en la que acuerda la medida, la magistrada señala que puesto que la solicitud de Moncloa no especificaba los «motivos o razones concretas para adoptar estas prevenciones», se requirió a la directora de Seguridad de Presidencia del Gobierno «para que ampliara su informe» para que precisara aquellas circunstancias que, según su criterio, «pudieran poner en riesgo la integridad física de Begoña Gómez», más allá de «valoraciones genéricas».
Al mismo tiempo, se pidió a la empresa Secoex, encargada de la seguridad de los juzgados, que determinase si era posible garantizar la seguridad de la esposa del presidente del Gobierno en el interior de la sede judicial. A lo que esta contestó que en los últimos años han pasado por el edificio «un alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, varios políticos nacionales, grandes empresarios, banqueros, deportistas famosos, etc,» sin que ninguna de ellos haya tenido «una sola queja referida a la seguridad». Según indicaba el responsable de seguridad de esta empresa, el dispositivo previsto incluye la presencia de cuatro vigilantes para «controlar» el juzgado de Juan Carlos Peinado, en cuya sala de vistas declarará Begoña Gómez, y antes de su llegada «se inspeccionará de forma minuciosa toda la zona, tanto a la entrada del edificio como dentro», estando él mismo pendiente en todo momento de que «no suceda ningún inconveniente que afecte a la seguridad del edificio». En conclusión, no apreciaba «ningún impedimento en garantizar la seguridad del edificio» y de «las personas que se encuentren dentro de él».
La decana recuerda que el acceso debe realizarse «con carácter general por las entradas comunes», aunque se trata de personas que «por su relevancia pública o por el interés mediático del procedimiento en el que comparecen solicitan su acceso por un lugar diferente, «debe existir una justificación que excepcione la regla general que afecta a todos los ciudadanos, como la posible existencia de un riesgo para la seguridad, la vida o integridad física de estas personas».
En definitiva, la decana acuerda que Begoña Gómez «acceda a la sede judicial de Plaza de Castilla por el garaje para prestar declaración» ante el Juzgado de Instrucción número 41 y que los medios de comunicación puedan acceder al distribuidor de la sexta planta, en la que se encuentra el citado juzgado, aunque limitándose su presencia a tres agencias de noticias, «que podrán distribuir a otros medios la información recabada» y a otros tres periodistas «que seleccionarán los profesionales acreditados».
Eso sí, deja claro que cualquier medida de protección de Begoña Gómez desde su entrada y durante permanencia en el edificio deberá realizarse «en coordinación y colaboración» entre la empresa de seguridad adscrita a los juzgados y el Departamento de Seguridad de Presidencia del Gobierno.
Asimismo, la magistrada indica que se cause «el menor perjuicio posible» al resto de actuaciones procesales que se puedan estar practicando en los juzgados de instrucción de la misma planta, así como del resto del edificio judicial.