Tras la reunión del Consejo de Gobierno del BCE,Ebury destaca el hecho de que el Banco Europeo haya mantenido un perfil bajo, dejando los tipos de interés estables y sin proporcionar una orientación clara sobre futuras decisiones de la futura política económica.
Para Ryan, analista de Ebury, “la presidenta Lagarde se guardó las cartas y reiteró en gran medida los comentarios del banco de la reunión anterior. Señaló que la inflación de la zona del euro sigue siendo demasiado alta y que seguirá situándose por encima del objetivo el próximo año, así que prevé que la economía del bloque vuelva a crecer en el segundo trimestre, aunque el Consejo de Gobierno observa ahora un ritmo de expansión más lento en relación con el primer trimestre.
Como se anticipó, Lagarde se negó a comprometerse con el momento y el ritmo de los recortes adicionales, diciendo que la decisión sobre las tasas estaría «abierta de par en par» en la reunión de septiembre del banco. Según Ebury, no se observa “ninguna razón para dudar de esta afirmación, sobre todo porque habrá muchos datos nuevos para que los miembros votantes los analicen de cara al próximo encuentro”, como indicó Lagarde durante su conferencia de prensa.
Para Ebury, “se mantiene nuestra previsión a favor de dos recortes de tipos más del BCE este año, y creemos que las comunicaciones de hoy y los recientes datos de inflación, son coherentes con las reducciones de tipos en septiembre y diciembre, cuando se publicarán los dos próximos conjuntos de proyecciones económicas. Los mercados todavía no lo han descontado del todo, por lo que podríamos ver una modesta caída en el euro si el BCE relaja su política en línea con nuestras expectativas”,