Tras esta operación, el control de la sociedad conjunta se equilibra al 50% entre Vodafone y las referidas firmas de capital riesgo, tal y como estaba previsto cuando se anunció el primer acuerdo con ambas sociedades.
El precio de la transacción, de 32 euros por título, conserva la misma valoración de la transacción inicial, anunciada el 9 de noviembre de 2022. De este modo, los ingresos netos totales para Vodafone por la venta de Vantage Towers ascienden a 6.600 millones de euros. Según la teleco, dichos fondos extraordinarios se destinarán para reducir la deuda neta del grupo en alrededor de 0,1 veces deuda sobre ebitda. Por lo tanto, dicho ratio se fijará en un rango de apalancamiento de entre 2,25 y 2,75 veces.
Según informa la agencia Reuters, Oak Holdings compró el 10% de la participación y, tras la operación, Vodafone dijo que Oak Holdings posee el 89,3% de Vantage Towers, con una participación efectiva de Vodafone del 44,7%. Vantage Towers explica que el despliegue y desarrollo de una infraestructura móvil de vanguardia a escala y ritmo acelerará la transición de Europa a la 5G, lo que dará lugar a una cobertura integral y a ciudades inteligentes que revolucionarán la vida cotidiana. En ese empeño, el grupo se centra en tres áreas clave: Personas, Medio Ambiente y Actividad. Sobre esto último, la compañía explica que primero localiza, adquiere y construye infraestructuras líderes en el sector. «Esto sienta las bases que nuestros clientes y socios necesitan para ofrecer una cobertura más amplia y una mayor capacidad a más personas que nunca. A partir de ahí, nuestras capacidades 5G y otras tecnologías de vanguardia contribuirán al crecimiento de IoT, que cambiará las reglas del juego y liberará el potencial de ciudades verdaderamente inteligentes en toda Europa».