En base a la información adelantada por ‘The Wall Street Journal’, las compañías de internet y operadores de telecomunicaciones del gigante asiático han estado probando el último procesador de Huawei, llamado Ascend 910C, en las últimas semanas y, según las personas familiarizadas con el asunto, la empresa ha adelantado a sus clientes potenciales que el semiconductor es comparable al H100 de Nvidia. La capacidad de Huawei para seguir avanzando en chips es la última señal de cómo la compañía ha logrado superar los obstáculos erigidos por Estados Unidos y desarrollar alternativas chinas a los productos fabricados por el país estadounidense y sus aliados. Y es que gracias al apoyo estatal, la empresa se ha convertido en un campeón nacional en áreas que incluyen IA y una parte clave del esfuerzo de Beijing por «eliminar» las tecnologías procedentes de EEUU.
Aún así, las fuentes han indicado a ‘The Wall Street Journal’ que Huawei ha tenido retrasos en la producción de sus chips actuales y se enfrenta a la perspectiva de más restricciones estadounidenses que podrían privarla de componentes de máquinas y de los últimos chips de memoria utilizados en hardware de IA.
Con todo, empresas como ByteDance, la matriz de TikTok, el gigante de los motores de búsqueda Baidu o el operador de telecomunicaciones estatal China Mobile ya están en conversaciones iniciales sobre la obtención del 910C. Las negociaciones iniciales entre Huawei y los clientes potenciales subrayan que es probable que los pedidos superen los 70.000 chips, con un valor total de alrededor de 2.000 millones de dólares.
Huawei pretende empezar a realizar envíos tan pronto como en octubre, aunque según las personas con conocimiento del asunto, las compras finales pueden diferir de los planes iniciales y el cronograma de entrega puede cambiar.
Cabe recordar que Huawei forma parte de la lista de empresas a las que Washington considera una amenaza para la seguridad nacional, lo que le ha impedido utilizar fábricas en lugares como Taiwán para fabricar sus chips y ha dificultado el acceso a componentes críticos y equipos de fabricación. Por ello, China está intensificando el apoyo a la fabricación de semiconductores y en mayo recaudó 48.000 millones de dólares en la tercera entrega de un fondo de inversión nacional para la industria.