«El final del año es un poco más alentador de lo que se esperaba en general. El repunte de la actividad del sector servicios suministra un bienvenido impulso a la economía en general», apuntan en Hamburg Commercial Bank, donde añaden que la situación del sector manufacturero «sigue siendo bastante grave».
«La producción cayó a un ritmo más rápido en diciembre que en cualquier otro momento del año y los pedidos entrantes también se redujeron. El ciclo de reducción de las existencias tampoco muestra señales de detenerse. Por otra parte, los datos globales del índice PMI Manufacturero señalaron una estabilización de las condiciones operativas en noviembre, ofreciendo ligeras esperanzas de que la tendencia bajista podría no continuar incesantemente en la zona euro», afirman. En concreto, el ‘flash’ del índice PMI compuesto de la actividad total de la zona euro, ajustado estacionalmente, se situó por debajo del nivel de ausencia de cambios (50) por segundo mes consecutivo en diciembre, señalando una nueva reducción de la actividad empresarial a finales de 2024.
No obstante, la última lectura (49,5), supuso una mejora frente a 48,3 registrado en noviembre y sugiere una caída menos abrupta y apenas marginal de la actividad total. Las empresas de la zona euro continuaron enfrentándose a dificultades para captar nuevos pedidos en diciembre, que disminuyeron por séptimo mes consecutivo y se han registrado caídas tanto en el sector manufacturero como en el sector servicios. La tasa de contracción fue sólida, aunque más débil que en noviembre.
Los nuevos pedidos de exportación (que incluyen el comercio dentro de la zona euro) volvieron a caer y lo hicieron más rápidamente que los nuevos pedidos en total. Los nuevos pedidos procedentes del extranjero disminuyeron intensamente, pero en la menor medida observada desde agosto, puesto que en los dos sectores estudiados se registró una atenuación de las tasas de contracción en comparación con el mes anterior.
Los productores de la zona euro volvieron a reducir su actividad de compra en diciembre y el intenso declive de la compra de insumos fue el más pronunciado de los observados en cualquier otro mes de 2024. También se registraron nuevos declives intensos de los stocks de compras y de productos terminados. De hecho, el ritmo de erosión de las existencias de productos terminados fue el más elevado desde julio de 2021. Por otra parte, los plazos de entrega de los proveedores se alargaron tan solo marginalmente. Debido a la caída de los nuevos pedidos y de la actividad comercial en diciembre, las empresas redujeron sus niveles de empleo por quinto mes consecutivo. Aunque se mantiene modesto, el ritmo de recorte de empleo se aceleró y fue el más pronunciado de los últimos cuatro años.
Una sólida reducción de las plantillas en el sector manufacturero fue acompañada de casi una paralización del empleo en el sector servicios. Los números de dotación de personal disminuyeron en Alemania y Francia, pero continuaron aumentando en el resto de la zona euro en su conjunto.
En lo referente a los precios de compra, aumentaron a un ritmo marcado en diciembre, que fue el más acelerado de los últimos cuatro meses. La tasa de inflación se mantuvo prácticamente igual que el promedio antes de la pandemia. El aumento de los costes reflejó un incremento agudo y acelerado entre las empresas de servicios. En el sector manufacturero, los costes de los insumos siguieron cayendo, aunque solo marginalmente y al ritmo más lento de la actual secuencia de cuatro meses de reducción de los precios de compra.
La tasa de inflación de los precios de venta también cobró más impulso en el último mes del año, acelerándose por tercer mes consecutivo hasta registrar el ritmo más rápido de crecimiento desde agosto pasado, pero de todas formas se mantuvo muy por debajo de la máxima observada en 2022. Al igual que en el caso de los costes de los insumos, el aumento de las tarifas se concentró en el sector servicios.
«En su reunión del 12 de diciembre, el Banco Central Europeo mencionó que está vigilando de cerca la inflación del sector servicios, que se mantiene muy por encima de la inflación general. Los indicadores de precios del índice PMI no ofrecen ninguna tranquilidad en este sentido: los costes de los insumos han aumentado a un ritmo más rápido por tercer mes consecutivo y los precios de venta siguieron la misma tendencia», comentan en Hamburg Commercial Bank.
Por último, sobre las perspectivas, después de precipitarse hasta su mínima de doce meses en noviembre, la confianza empresarial recuperó algo de terreno en diciembre, pero se mantuvo más débil que el promedio de la serie. El optimismo se fortaleció tanto en el caso de las perspectivas para la producción futura en el sector manufacturero como en el de las expectativas para la actividad comercial en los próximos doce meses en el sector servicios y las empresas de servicios se mantuvieron más confiadas que sus homólogos industriales.