Sobre la política de tipos de interés –la principal herramienta de la que dispone el BCE para frenar la economía o incentivarla– hay dudas sobre cuál es la estrategia que seguir.
Una muestra de esa incertidumbre es el errático comportamiento del Euribor los últimos 15 días. Desde que se rescató el banco estadounidense Silicon Valley Bank, el Euribor ha oscilado entre el 3,9% del viernes día 9 hasta el 3,3% de este martes. Es una volatilidad absolutamente inhabitual en el indicador que suele mantener tendencias al alza o a la baja sin grandes oscilaciones.
“El hecho de que haya habido turbulencias financieras pone en duda la hoja de ruta de subida de tipos y por tanto el Euribor, primero, se hace más volátil y va también hacia abajo, en alguna ocasión”, reflexiona Santiago Carbó, director de Estudios Financieros de Funcas. En un informe CaixaBank Research recuerda que el “Euribor es el tipo europeo de oferta interbancaria (Euro InterBank Offered Rate, en inglés), es decir, el tipo de interés al cual los bancos se prestan dinero entre sí a distintos vencimientos”. El Euribor anticipa donde estarán los tipos en el medio y largo plazo. Eso significa que las bajadas y subidas de estas semanas muestran que no había una idea clara de lo que haría el BCE ante el escenario actual.