La medida se ha pactado «con el fin de reforzar las tiendas para atender la buena evolución de las ventas y con ello mejorar la atención y el servicio al cliente», según ha informado el grupo de distribución en un comunicado. Para el Corte Inglés, el acuerdo se basa en «dos premisas»: el mantenimiento del empleo y «un tratamiento especial de desvinculación voluntaria para las personas con más veteranía», es decir, las que tienen más de 59 años cumplidos a 30 de junio de 2023, «la mayor parte de las cuales tienen una larga relación con la empresa».
En este contexto, la empresa ha explicado que al plan de bajas incentivadas «podrán adherirse voluntariamente» y «en condiciones más favorables» aquellas personas que cumplan los requisitos acordados con la representación legal de los trabajadores.
Asimismo, el plan de reordenación prevé el traslado a las tiendas de profesionales de los servicios centrales en Madrid, en las direcciones regionales y en otras unidades administrativas. «La modernización y desarrollo de los procesos y sistemas experimentados en los últimos tiempos ha desembocado en una optimización de los modelos de gestión, lo que, en el caso de nuestra empresa, se traduce en la necesidad de reordenar los servicios centrales para potenciar los establecimientos comerciales», ha justificado el Corte Inglés.