Así su primer mensaje sobre los casos de acoso sexual que han sacudido al PSOE en las últimas semanas no es otro que «su compromiso con el feminismo es absoluto», ha afirmado. Sánchez ha reconocido errores pero ha «vendido» que el gobierno de coalición progresista es pionero en la lucha por la igualdad y el feminismo: «no vamos a aceptar lecciones de quienes cuestionan la violencia contra las mujeres o pactan con quienes cuestionan la violencia contra las mujeres». En este sentido, ha defendido que «el acoso y la denuncia no tienen un carné», pero que «la contundencia» contra el abuso «sí tienen unas siglas». No vamos a aceptar lecciones —ha insistido— de quienes votan en contra de esos avances, de quienes recurren esos avances ante el Tribunal Constitucional».
Sin entrar en ningún momento a valorar los escándalos en el seno del PSOE, según Sanchez, «todos los avances en materia de igualdad» entre hombres y mujeres «siempre se han logrado de la mano, en primer lugar, de las mujeres y bajo gobiernos progresistas».
A continuación, Sánchez ha calificado de «torquemadas» a «quienes sueltan proclamas de ejemplaridad desde una sede pagada con dinero negro». Respecto a los casos de corrupción ha incidido en que «hoy se actúa con contundencia, mientras que el PP convive con la corrupción». El presidente ha rematado su ataque a la oposición afirmando que : «nos enfrentamos a la oposición más estéril, más destructiva y más ultra de los últimos tiempos». Sobre la fragilidad parlamentaria de la coalición, la ha despachado asegurando que «lo que nos toca es sudar la camiseta hasta la última gota para llegar a acuerdos». Sobre este aspecto, se ha mostrado dispuesto a buscar apoyos parlamentarios «hasta debajo de las piedras». Tampoco ha hecho Sánchez ninguna referencia a casos como los de Ábalos, Koldo, Santos Cerdán, Leire Díez… sí ha asegurado que en el Ejecutivo están «cargados de determinación, convicción y energía» para seguir en la segunda mitad de la legislatura, aunque ello implique aguantar «campañas de acoso persona
Sánchez ha felicitado a todos los ministros de su Gobierno y ha dibujado un panorama económico idílico: «tenemos una de las economías más prósperas de Occidente», ha subrayado. El triunfalista balance presidencial ha concluido que «esto es un éxito de país. Nunca se han creado tantos empleos en tan poco tiempo. Incluso creamos empleo en todos los sectores relacionados con la economía verde». Para Sánchez se trata de «grandes resultados para la mayoría social de nuestro país». Matizó que «el poder adquisitivo todavía es bajo, todavía hay demasiada gente que vive en precariedad. Pero lo que es innegable es que vamos por el buen camino». «Desde que llegamos al Gobierno, hemos incrementado en más de 120.000 millones de euros la inversión», ha enfatizado.
El jefe del Ejecutivo ha reivindicando que «siempre» han sido los progresistas, y en particular el PSOE, «quien ha abierto camino» en los derechos de las mujeres, como el derecho a la interrupción voluntaria del aborto o la ley contra la violencia de género. También ha criticado a los gobiernos del PP que rechazan lo que ha calificado como «derecho al aborto de las mujeres». «Esto es inaceptable y se va a acabar. No vamos a permitir que gobiernos ideologizados hacia la ultraderecha incumplan la ley».
Llegado este punto, Sánchez ha hecho un anuncio de claro corte electoralista: ha anunciado la creación de un abono único de transportes en todo el país, que entrará en vigor en la segunda quincena de enero. un abono que afectará a dos millones de personas, según ha asegurado, que van a poder viajar por todo el país por una tarifa plana de 60 euros al mes para los adultos y 30 euros para jóvenes. «Un trabajador que vaya de Vigo a Santiago a trabajar cada día se ahorrará un 60% al mes».
Sobre la vivienda ha indicado que «se han declarado 304 municipios como zonas tensionadas en cuatro comunidades autónomas, que son las que cumplen con la ley de vivienda. Hay otras que por motivos ideológicos no lo hacen».
El presidente del Gobierno ha fingido que bostezaba en su respuesta a un periodista que le ha preguntado si va a tomar medidas nuevas tras las últimas detenciones y registros relacionados con su Gobierno y su partido y ha venido a decir que bastante medida es anunciar un abono transporte de 60 euros, que serán 30 para los jóvenes, con el que poder viajar en Media Distancia, Cercanías y autobuses estatales.
«¿Qué hacemos?, ¿bostezamos cuando decimos lo del abono único de transporte?, ¿de verdad?, ¿cuando se sube el sueldo a los funcionarios un 11 % hasta 2028? Ohh qué aburrido. Permítanme que lo lleve al extremo, creo que es importante saber dónde está la sustancia de las cosas», ha señalado en su habitual comparecencia de fin de año en la Moncloa, que este año ha adelantado para no tener que responder al previsible batacazo del PSOE en Extremadura.
