En este sentido, la crisis y la necesidad de garantizar el suministro energético han llevado a que cada vez más países, muchos de ellos de nuestro entorno, hayan decidido operar a largo plazo sus centrales nucleares. De los 422 reactores existentes en la actualidad en 33 países, más del 45% cuentan hoy en día con autorizaciones para operar 50, 60, 70 o, incluso, 80 años como en el caso de Estados Unidos. Otro hecho muy relevante ha sido la inclusión de la energía nuclear en los mecanismos de Taxonomía de la Unión Europea a principios de este año.
A la estrategia de operar a largo plazo los reactores existentes, se une la construcción de 58 unidades en 13 países y los numerosos anuncios de nuevos reactores en países con larga trayectoria nuclear como Francia o Reino Unido y en otros sin centrales como Polonia. “En estos proyectos participa de forma activa el sector nuclear español, que exporta tecnología de vanguardia, productos y servicios a más de 40 países y cuenta con reconocimiento y prestigio internacional”, recuerda el presidente de Foro de la Industria Nuclear Española, Ignacio Araluce.
La energía nuclear ha tenido un año más en España un papel esencial al generar electricidad de forma constante y firme aportando estabilidad a la red tras haber operado en base a plena potencia cerca de 8.000 horas y con indicadores de funcionamiento por encima del 90%. Con tan solo el 5,98% del total de la potencia instalada, en 2022 los siete reactores nucleares han generado 55.983 GWh netos, lo que ha representado el 20,26% de la electricidad del sistema. Han sido, además, esenciales en la lucha climática, ya que el 31,75% del total de la producción eléctrica libre de CO2 en España durante el pasado ejercicio se ha logrado gracias a la energía nuclear.
Las centrales nucleares españolas se mantienen siempre al día y con las últimas actualizaciones incorporadas. Precisamente, atendiendo siempre a la seguridad como prioridad y con el trabajo y compromiso del conjunto de la industria y de sus profesionales, añade el presidente de Foro Nuclear, “los titulares de las centrales nucleares invierten anualmente del orden de 200 millones de euros en actualizaciones y mejoras. De ahí que podamos afirmar que nuestras centrales son seguras, disponen de la última tecnología y, desde un punto de vista técnico, están preparadas para operar a largo plazo”.
No obstante, el presidente de Foro Nuclear ha recordado que el calendario de cierre acordado en 2019 sigue siendo el escenario con el que se trabaja actualmente, si bien la situación energética en aquel momento era distinta a la actual. Por ello, si el Gobierno de España, responsable de la política energética, reconsiderase ese calendario, la industria nuclear española se pondría a su disposición para analizar las condiciones que se propusiesen, teniendo en cuenta que es esencial garantizar la viabilidad del parque nuclear español durante todo el tiempo que esté operativo. En su intervención, Ignacio Araluce ha recordado que “si somos necesarios en la transición energética, hay que hacernos viables. Somos productores de electricidad, nos dedicamos a generar megavatios-hora. No entendemos por qué la tecnología nuclear tiene que estar tan penalizada y soportar tanta presión fiscal”.