Los precios de carga de vehículos eléctricos para quienes no tengan tarifas fijas han sido más bajos que nunca durante las horas de más sol. Concretamente, es entre las 10 y las 16 horas es cuando los precios se abaratan gracias en mayor parte por la aportación de las renovables, favorecidas por el buen clima. Por ejemplo, durante el mes de abril las renovables aportaron el 53,9% de la generación eléctrica peninsular, parecido a las cifras del mes anterior, pero algo por debajo del 58,6% anotado en enero. La operación que demuestra estos hechos es sencilla: multiplicar el tiempo de carga que necesita el vehículo por el precio del megavatio-hora (MWh) en ese momento.
En este sentido, desde comienzos de año, el precio de la electricidad para los clientes suscritos a la tarifa regulada se ha desplomado si lo comparamos con los mismos meses de 2022. En enero el precio mayorista se redujo en gran medida hasta los 69,6 euros/MWh, posicionándose como el precio más bajo desde febrero de 2021. En febrero, ya con menos influencia de la excepción ibérica, el precio mayorista medio fue 133,5 €/MWh por los 200,21 euros/MWh que marcó en el mismo mes del año 2022. En marzo, primer mes sin recurrir al tope al gas, tuvo un precio de 89,6 euros/MWh mientras que en el mismo periodo del año anterior el precio fue de 283,30€/el MWh, marcando de este modo récord. Por su parte, en abril la media cierra en 73,7 euros/MWh, su segundo precio más bajo desde mayo de 2021, frente a los 191,68 euros/MWh del año pasado en el mismo mes.