Un total de 1,38 millones de trabajadores faltaron a su puesto de trabajo en este periodo, en promedio, de las que más de un millón contaban con una baja médica. Es decir, en este agregado hay faltas justificadas y otras que no lo están, puesto que también se tienen en cuenta las bajas por cuidado del menor (maternidad/paternidad) u otro tipo de permisos no previstos a la hora de acordar la jornada anual. Precisamente, las bajas por incapacidad están justificadas, dado que un médico ha certificado que ese trabajador no está en condiciones de acudir a su puesto de trabajo. No obstante, esta cifra ha pasado a ser un problema debido a la saturación del sistema de atención primaria, que retrasa tanto la recuperación como el alta, y a la incidencia de los problemas de salud mental.
«El nivel de absentismo se situó en el tercer trimestre del ejercicio en el 6,3% de las horas pactadas, lo que representa un repunte de tres décimas respecto al 6% marcado en el mismo periodo de 2023» apunta el estudio a partir de los datos del INE, en el que también se subraya un aumento equivalente del absentismo por IT o baja. «Más de 293.000 personas se ausentaron cada día de su puesto de trabajo por razones distintas a la baja médica a lo largo del tercer trimestre de este año, un 21,2% del total de personas que no fueron a trabajar». Un dato que estaría parcialmente explicado por otros permisos que no se deben a la incapacidad del trabajador y que engloba las ausencias o retrasos injustificados. «En los últimos trimestres se observa una tendencia creciente en el absentismo debida, fundamentalmente, al incremento de absentismo por IT y motivado por el aumento de las bajas médicas», explica el ‘data analyst’ de Randstad Research-
La situación no es homogénea entre los diferentes sectores económicos. Las ausencias con más acuciadas en el ámbito de la industria, siendo el sector que concentra un mayor absentismo, con el 6,9% del total de las horas pactadas, aunque los servicios le siguen de cerca con un 6,3% frente al 5,3% de la construcción. «El análisis más detallado por actividades expone una diferencia pronunciada, ya que mientras que en algunas los niveles son reducidos otras cuentan con un gran número de horas perdidas» destacan. El análisis más pormenorizado, al margen de estos grandes sectores, muestra que son los juegos del azar (11,1%), los servicios de edificios y jardinería (10,9%), actividades postales y de correo (10,6%) y la asistencia en establecimientos residenciales los que registran cuotas más elevadas.
Por territorios, Canarias es la región más afectada por esta situación con una tasa del 8,1% en el tercer trimestre, seguida de País Vasco (7,6%), Galicia (7,6%) y Murcia (7,2%). En cambio, Madrid (5,4%), Baleares (5,8%), Andalucía (6%) y Castilla La-Mancha (6,1%) anotan los niveles más bajos. Si bien, este esquema se altera ligeramente al poner el foco en el absentismo causado por las bajas médicas con Canarias, Galicia y País Vasco a la cabeza. En total, se perdieron un 5% de las horas pactadas, lo que equivale a una media de 1.087.875 trabajadores de baja cada día. El Ministerio de Seguridad Social pondrá en marcha en tres meses una mesa de diálogo con los representantes de CEOE, Cepyme, CCOO y UGT para abordar esta cuestión, como pactaron el la última reforma de pensiones.