Los ingresos del semestre también han registrado una caída del 3%, hasta los 10.617 millones de euros (10.897 millones en 2022). Según destaca Adidas en la nota de resultados, si bien las tendencias de venta total mejoraron a lo largo del período, la empresa ha seguido con su estrategia conservadora de venta total. Además, remarca que la interrupción del negocio habitual de Yeezy «representó un lastre de alrededor de 400 millones de euros en la comparación interanual durante la primera mitad del año».
Por su parte, el margen bruto de la compañía disminuyó 2,3 puntos porcentuales hasta el 47,9% (2022: 50,1%) durante la primera mitad del año. «El desarrollo mejoró significativamente entre el primer y el segundo trimestre, en parte impulsado por mejores ventas directas y mejores niveles de descuento», destaca. Aunque los costes más altos de la cadena de suministro, la evolución negativa de la moneda, las asignaciones de inventario más altas, así como la actividad promocional «pesaron en el desarrollo del margen bruto» en los seis primeros meses, Adidas destaca que al mismo tiempo, los aumentos de precios beneficiaron el margen bruto en el primer semestre. La partida otros gastos operativos aumentó un 4% hasta los 4.949 millones de euros (2022: 4.759 millones de euros) en la primera mitad del año. Durante este período, la empresa registró costes únicos de alrededor de 70 millones de euros relacionados con la revisión estratégica que está realizando, así como donaciones y provisiones para futuras donaciones por un importe de alrededor de 110 millones de euros.
Por otro lado, Adidas cosechó un beneficio operativo de 236 millones de euros (2022: 828 millones de euros) durante los primeros seis meses del año. La venta inicial del producto Yeezy en el segundo trimestre tuvo un impacto positivo en las ganancias operativas de la compañía en unos 150 millones de euros durante la primera mitad del año. El margen operativo ha alcanzado el 2,2% (2022: 7,6 %) en el primer semestre.
Respecto al segundo trimestre, el beneficio neto por operaciones continuadas ascendió a 96 millones de euros, un 73% menos que los 360 millones del mismo periodo del año anterior, y el beneficio por acción se redujo a 0,48 euros (1,88 euros en 2022).
Adidas explica que la evolución de los ingresos «siguió viéndose afectada por el enfoque conservador de la empresa en las ventas para reducir los elevados niveles de inventario, especialmente en Norteamérica y China. Aunque se benefició de la primera venta de parte del inventario de Yeezy (generó alrededor de 400 millones de euros, en línea con las ventas generadas por la marca en el mismo periodo del año anterior).
En el trimestre, los ingresos de la empresa cayeron un 5%, hasta los 5.343 millones de euros (5.596 millones en 2022). Por su parte, el margen bruto del segundo trimestre se elevó 0,6 puntos porcentuales hasta el 50,9% (2022: 50,3%). «Esta mejora se debió principalmente a los aumentos de precios que la empresa implementó, así como a una mejor combinación de canales», ha resaltado Adidas, que reconoce que los costes más altos de la cadena de suministro y los movimientos cambiarios desfavorables «continuaron pesando fuertemente en el desarrollo del margen bruto».
El beneficio operativo de la empresa ascendió a 176 millones de euros (2022: 392 millones de euros) en el trimestre, lo que resulta en un margen operativo del 3,3% (frente al 7% de 2022).
En cuanto a las perspectivas para el año, cabe recordar que el pasado 24 de julio la compañía ajustó su orientación financiera para todo el año para reflejar el impacto positivo de la primera venta de parte de su inventario de Yeezy y un desarrollo ligeramente mejor de lo esperado del negocio en la primera mitad del año.
Al mismo tiempo, «persisten los desafíos macroeconómicos y las tensiones geopolíticas». «Siguen existiendo riesgos elevados de recesión en América del Norte y Europa, así como incertidumbre en torno a la recuperación en China. Además, el desarrollo de los ingresos de la empresa seguirá viéndose afectado por las iniciativas para reducir significativamente los altos niveles de inventario», ha destacado la firma. Como resultado, Adidas espera ahora que los ingresos disminuyan a una tasa de un dígito medio en 2023 (anteriormente: disminución a una tasa de un dígito alto).
Y también prevé que el beneficio operativo subyacente se sitúe en torno al nivel de equilibrio. «Todavía se anticipa que la ganancia operativa subyacente de la compañía, excluyendo cualquier evento único relacionado con Yeezy y la revisión estratégica en curso, se encuentre en el nivel de equilibrio», comenta Adidas.
Incluyendo el impacto positivo de la primera caída de Yeezy de alrededor de 150 millones de euros, la cancelación potencial del inventario restante de Yeezy de ahora 400 millones de euros (anteriormente: 500 millones de euros) y costes únicos relacionados con la revisión estratégica de hasta 200 millones de euros (sin cambios), la compañía ahora espera reportar una pérdida operativa de 450 millones de euros en 2023 (anteriormente: pérdida de 700 millones de euros).