Tanto Airbus como Boeing lograron alcanzar el pasado año 2023 sus objetivos de entregas anuales, con el fabricante europeo superando sus expectativas por 15 envíos al llegar a la cifra final de 735 envíos realizados. Su competidor americano, por otra parte, logró llevar a cabo un total de 396 entregas del modelo 737 a lo largo del año, superando los 375 aviones previstos.
En total, Airbus ha superado por 203 unidades el número de aeronaves entregados por su rival en 2023, 11% más que el del año anterior. Boeing, por otra parte, entregó 48 aviones más que en 2022. En cuanto a pedidos, Airbus vuelve a quedar por encima de Boeing un año más, con 1.274 encargos más que en 2022. En total, la europea tuvo 2.094 pedidos, frente a los 1.456 de Boeing.
Faury, consejero delegado de Airbus, ha señalado que el último año ha sido «histórico para el negocio de aviones comerciales» de la compañía. El directivo ha destacado que en este ejercicio la empresa ha registrado «unas ventas y entregas excepcionales, en el extremo superior de nuestro objetivo». A pesar de estas buenas noticias a nivel de cifras, ambos fabricantes han tenido problemas para seguir el ritmo de la creciente demanda de nuevos aviones de bajo consumo tras la pandemia del Covid-19. Además, Boeing y Airbus han estado lidiando con la interrupción de los envíos de su conjunto de proveedores y con sus propios déficits mientras trabajaban para acelerar la producción.
La creciente demanda de aviones es un 20% superior a la capacidad de producción de Airbus si tuviera los componentes suficientes, lo que sitúa este asunto como la «prioridad» del fabricante de aeronaves, que busca aumentar su plantilla más allá de los 13.000 puestos anuales, renovar su flota e invertir en tecnologías sostenibles en los próximos años.
Así lo manifestó la compañía en un encuentro informativo a finales de 2023, en el que destacó este problema como su «principal reto», ya que «ahora mismo no hay capacidad para satisfacer la alta demanda de aviones». «En este 2023 la situación es sensiblemente mejor, pero aún así todavía no estamos completamente fuera de las dificultades», añadió. Otra cuestión añadida es la necesidad de renovar la flota en busca de una mayor sostenibilidad, teniendo en cuenta que el 25% de la flota actual tiene que renovarse en los próximos 10 años.
Asimismo, la compañía puso el foco en los proveedores, que «están teniendo dificultades en los motores, tanto problemas de suministro como de tiempos estimados». Actualmente, Airbus cuenta con 3.000 proveedores directos y mas de 15.000 indirectos. Pese a ello, la compañía resaltó que está bastante alineada con la senda de previsiones del último trimestre y cierre del año. Por tanto, aclaró que «no cree que nada impacte en el presupuesto previsto».