Pese al descenso y a las reducciones de los últimos años, España sigue siendo uno de los países de la UEM con mayores niveles de deuda. En el Observatorio, la AIReF analiza la situación de los mercados financieros en los últimos meses e incluye sus últimas previsiones, que proyectan una ligera reducción de la ratio en 2025, hasta el 101,6% del PIB por el menor impulso del crecimiento económico. A medio plazo, la AIReF estima reducción de la deuda hasta el 99,1% del PIB en 2029 y a largo plazo, en su escenario inercial, proyecta una deuda del 181% del PIB en 2070. La AIReF repasa las condiciones de financiación en los mercados de deuda, marcadas por la contención de la inflación en la eurozona y la relajación de la política monetaria. La inflación se sitúa virtualmente en el objetivo del 2% del Banco Central Europeo (BCE), mientras que los bancos centrales avanzan hacia una normalización gradual y basada en datos, con enfoques diferenciados entre la eurozona y Estados Unidos. Además, los bancos centrales han avanzado en la reducción de sus balances, con el objetivo de normalizar las condiciones monetarias tras años de políticas expansivas. La AIReF constata que, en lo que va de año, los mercados han experimentado una elevada volatilidad debido a las políticas arancelarias y fiscales de la administración Trump, las tensiones geopolíticas, las crecientes necesidades de gasto a las que se añaden los planes de defensa y la necesidad de reconducir los altos niveles de deuda y cumplir con los compromisos del nuevo marco fiscal europeo. Esta volatilidad ha impactado tanto en los bonos soberanos como en el tipo de cambio, elevando las rentabilidades en Estados Unidos por encima del 5% y provocando una depreciación del dólar de cerca del 10% frente al euro. En contraste, la mayor estabilidad macroeconómica en Europa y la política del BCE han contribuido a mantener las rentabilidades contenidas, reforzando el atractivo de la deuda europea.
• La deuda pública se situó en el 103,5% del PIB en el primer trimestre de 2025, lo que supone una reducción de 2,8 puntos respecto al mismo trimestre del año anterior, aunque España sigue siendo uno de los países con mayores niveles de deuda de la UEM • La AIReF repasa la situación de los mercados de deuda e incluye sus últimas previsiones, que proyectan una ligera reducción de la ratio en 2025, hasta el 101,6% del PIB por el menor impulso del crecimiento económico • A medio plazo, la AIReF estima una reducción hasta el 99,1% del PIB en 2029, mientras que, en el largo plazo, proyecta una evolución desfavorable hasta el 181% en 2070 en su escenario inercial • Según las proyecciones de la AIReF, sería necesario un ajuste de 3,16 puntos del PIB entre 2025 y 2040, distribuido en cuatro planes fiscales de cuatro años para garantizar una senda decreciente de la deuda a largo plazo • El ajuste, aplicado de forma progresiva y decreciente, permitiría reducir la ratio de deuda hasta el 62% del PIB en 2050, acercándola al umbral del 60% del Tratado de Maastricht • Analiza la deuda autonómica, que se situó en el 21,1% del PIB en 2024, con 13 Comunidades autónomas con un nivel superior a la referencia legal del 13%. Comunidad Valenciana, Murcia, Cataluña y Castilla-La Mancha son las regiones más endeudadas con relación a su PIB • La AIReF estima que, en un escenario a políticas constantes, la ratio de deuda autonómica se reducirá gradualmente en el medio plazo, pero seguirá por encima del 18% en 2029. A más largo plazo, seguirá disminuyendo y alcanzaría el 13% del PIB en 2044
En este contexto, la rentabilidad de las Letras del Tesoro en España ha caído casi a la mitad debido a las bajadas de tipos del BCE, pero sigue atrayendo a los pequeños ahorradores. La demanda minorista se mantiene fuerte, con reinversiones cercanas al 90% y una cuota de tenencia por parte de los hogares aún elevada, en torno al 30% del total. Además, el Tesoro ha seguido reduciendo el coste de sus nuevas emisiones en 2025. El coste medio ha descendido hasta el 2,79%, 120 puntos básicos por debajo del máximo alcanzado en 2023.
Proyecciones de la deuda
La AIReF prevé una ligera reducción de la ratio sobre PIB en 2025, situándola en el 101,6%, lo que supone una caída de solo 0,2 puntos respecto a 2024. Esta moderación en el ritmo de descenso responde a un menor impulso del crecimiento económico, un mayor ajuste stock-flujo asociado a los préstamos europeos y un impacto del déficit público todavía negativo, aunque más contenido. Estas previsiones son coherentes con las recogidas por el Gobierno. En el medio plazo, la AIReF estima una reducción gradual de la deuda pública, que alcanzaría el 99,1% del PIB en 2029, lo que supone un descenso de 2,7 puntos respecto a 2024. No obstante, señala que esta tendencia de reducción muestra signos de agotamiento a medida que avanza la década. De hecho, 2030 marcará un punto de inflexión en la evolución de la deuda, con un retorno a la senda ascendente por el impacto del envejecimiento. En 2050, a pesar de la menor presión demográfica, la trayectoria ascendente se mantiene por el incremento del gasto en intereses. Así, en el largo plazo, la AIReF proyecta en su escenario inercial una evolución desfavorable de la ratio que alcanza el 181% del PIB en 2070. La AIReF incluye en el Observatorio, como ya hizo en su último informe, un escenario de cumplimiento de las reglas fiscales del nuevo marco de gobernanza europeo, que muestra una evolución favorable de las finanzas públicas en el largo plazo.
Según las previsiones incluidas en el Plan Fiscal y Estructural de Medio Plazo (PFEMP), el déficit y la deuda se reducirían en 2041 en 1,2 y 25 puntos porcentuales del PIB, respectivamente en comparación con 2024. Teniendo en cuenta sus proyecciones inerciales, la AIReF estima que sería necesario un ajuste de 3,16 puntos del PIB entre 2025 y 2040, distribuido en cuatro planes fiscales de cuatro años, para garantizar una senda decreciente de la deuda a largo plazo. Este ajuste, aplicado de forma progresiva y decreciente, permitiría reducir la ratio de deuda hasta el 62% del PIB en 2050.
Cada plan garantizaría que la deuda continúa bajando incluso en escenarios adversos. El primero, ya comprometido para 2025-2028, incluiría un ajuste anual de 0,42 puntos. Los planes posteriores requerirían esfuerzos menores, adaptándose a las necesidades de sostenibilidad a largo plazo. La AIReF señala que, si bien la posible aplicación de la cláusula de escape nacional permitiría absorber el aumento del gasto en defensa sin comprometer el cumplimiento del primer Plan Fiscal, dicho incremento supondría un deterioro de la posición fiscal futura, al traducirse en mayores niveles de déficit y endeudamiento. Para mantener una senda descendente de la ratio de deuda a largo plazo, se estima que sería necesario un ajuste fiscal adicional de 0,13 puntos del PIB por cada incremento de 0,5 puntos del PIB en el gasto en defensa, a aplicar en el siguiente plan fiscal.
Deuda autonómica
En el Observatorio, la AIReF analiza la evolución de la deuda autonómica e incluye fichas individuales para cada región. La deuda autonómica ha seguido una trayectoria marcadamente ascendente desde 2007, hasta situarse en el 21,1% del PIB a finales de 2024. Esta situación es común en la mayoría de las comunidades autónomas, puesto que 13 de las 17 superan el umbral legal del 13%, con marcadas diferencias regionales. Comunidad Valenciana, Murcia, Cataluña y Castilla-La Mancha son las comunidades más endeudadas en relación con su PIB, con ratios cercanas o superiores al 30%. Cataluña lidera en términos absolutos, mientras que la Comunidad Valenciana presenta la mayor deuda per cápita. En contraste, Navarra, Canarias, País Vasco y Madrid mantienen niveles por debajo del 13% del PIB. La AIReF repasa también el uso de los mecanismos extraordinarios de financiación por parte de las comunidades, que se ha mantenido estable en torno al 60% desde 2017, tras un rápido aumento entre 2012 y 2016. Estos mecanismos han sido utilizados de forma muy desigual entre territorios y a lo largo del tiempo. Actualmente, seis comunidades —entre ellas Cataluña, Comunitat Valenciana y Castilla-La Mancha— presentan una utilización superior al 75%, mientras que otras, como Navarra, País Vasco y Madrid, no recurren a ellos. Cataluña, Comunitat Valenciana y Andalucía concentran el 75% del total de los fondos recibidos
En un escenario a políticas constantes, la AIReF estima que la ratio de deuda autonómica se reducirá gradualmente en el medio plazo, aunque seguirá por encima del 18% en 2029. A más largo plazo, bajo un escenario inercial, seguiría disminuyendo y alcanzaría el 13% en 2044, con una reducción de 6,8 puntos hasta 2040, gracias al crecimiento del PIB y a una evolución favorable del saldo primario. No obstante, si se aplicara un ajuste fiscal gradual de 0,23 puntos anuales entre 2025 y 2028, la ratio podría alcanzar el 13% ya en 2031.