La revisión al alza de 2024 se debe, principalmente, a la incorporación de los datos de crecimiento disponibles hasta la fecha, que en su conjunto fueron mejores de lo esperado. La revisión al alza para la previsión de 2025 también se explica por la incorporación de una senda de tipos de interés con una moderación más rápida de la que se preveía en septiembre y por el impulso asociado a las medidas de apoyo frente a la DANA. En cuanto a la inflación, el Banco de España ha dejado las previsiones prácticamente inalteradas, con un pequeño ajuste de 1 décima al alza en 2026, hasta el 1,8%.
Los costes laborales en España aceleraron su ritmo de crecimiento en el 3T. Según la encuesta trimestral de coste laboral (ETCL), el coste laboral por hora efectiva (con datos corregidos y desestacionalizados) quebró la senda de ralentización que venía anotando y creció en el 3T 2024 un 5,1% interanual (4,4% en el 2T), mientras que el coste salarial por hora creció algo menos, un 4,8% interanual, frente al 4,4% anterior. Por otro lado, las vacantes no cubiertas en el mercado laboral se redujeron ligeramente (–0,6% intertrimestral), hasta algo más de 150.000, aunque todavía siguen muy elevadas: los servicios siguen acaparando cerca del 90% de estas vacantes, sobre todo comercio, sanidad y, especialmente, Administración pública.
Los indicadores de servicios y comercio exterior mantuvieron el dinamismo en octubre. Las exportaciones en octubre crecieron un 9,3% interanual y las importaciones un 4,8% interanual. Gracias a la recuperación de la actividad exterior en los últimos meses, las exportaciones registran un crecimiento interanual del 0,7% en el acumulado del año (1,1% en productos no energéticos y –4,1% en energéticos), la primera cifra acumulada positiva en lo que va de 2024. Por su parte, las importaciones continúan en terreno negativo (–0,4% interanual), presionadas por la de los bienes energéticos (–8,3%), que contrasta con el incremento del 1% en los productos no energéticos. Con estas cifras, el déficit comercial acumulado en 12 meses se reduce un 13% interanual, situándose en 36.851 millones de euros. Por otro lado, el índice de producción del sector servicios avanzó un 3,6% interanual en términos desestacionalizados, un aumento menor que el de septiembre (5,6% interanual), pero por encima del promedio de los primeros meses del año (2,7%). En términos intermensuales desestacionalizados, el aumento fue del 0,6%.
Las compraventas de vivienda volvieron a repuntar en octubre de forma extraordinaria (51% interanual tras el 41% registrado en septiembre), hasta situarse en máximos desde mediados de 2007. Las transacciones de vivienda nueva siguen despertando el mayor interés entre los compradores (83% interanual en octubre), si bien las ventas de segunda mano también aumentaron con fuerza (41% interanual) y se encuentran en máximos en la serie disponible. En el año, se han cerrado cerca de 537.300 operaciones, lo que supone un incremento del 7,5% interanual. Por regiones, se produjo un aumento generalizado (solo Baleares registró una caída), si bien cabe señalar que todos los grandes mercados registraron un crecimiento por debajo de la media.
La Fed recortó los tipos de interés 25 p. b. hasta el intervalo de 4,25%-4,50%, 100 p. b. por debajo del pico alcanzado en 2023. El recorte fue acompañado por un cambio claro en el tono de la Fed hacia una posición más cautelosa, señalando una mayor paciencia de cara a seguir bajando los tipos en el futuro. Así, el dot plot pasó de proyectar cuatro recortes en 2025 (–100 p. b.) a tan solo dos, dejando los tipos de interés en un rango de 3,75%-4,00%, es decir, 50 p. b. por encima de lo proyectado en la reunión de septiembre. El cambio de tono se basó en tres pilares: una mayor expectativa de inflación para 2025 y 2026, menores riesgos de enfriamiento del mercado laboral, y el hecho de que los tipos están 100 p. b. más cerca del tipo neutral. Además, Powell afirmó que el contexto macroeconómico sugiere que estamos en el punto, o cerca, de reducir la velocidad de la relajación monetaria.
Los mercados a la expectativa de la Fed, el BoE y el BoJ. Los mercados financieros hicieron una lectura hawkish de la reunión de la Fed, principalmente debido a la revisión al alza que hizo el FOMC de las perspectivas de inflación y al cambio de tono en general (véase noticia de la Fed). Así, tras haber transcurrido la primera parte de la semana en relativa calma, tras la reunión, las rentabilidades de los treasuries repuntaron para cerrar la semana con subidas de hasta 16 p. b. en el tramo largo de la curva, contagiando a la deuda soberana de la eurozona que experimentó repuntes de hasta 8 p. b. en las rentabilidades. El repunte de rentabilidades fue acompañado por un ajuste al alza en las expectativas de los tipos de interés en EE. UU.: los mercados de futuros monetarios pasaron a descontar un tipo de interés a finales de 2025, 25 p. b. más elevado que el anticipado antes de la reunión, hasta el nivel del 4,00%-4,25%. Las bolsas se vieron resentidas, cayendo en la semana un 3% en EE. UU. y un 2% en la eurozona. En cuanto al mercado de divisas, el dólar capitalizó el reajuste de expectativas de tipos de interés y se fortaleció hasta el 1,03 frente al euro y 158 con el yen, lastrado además por la decisión del BoJ de mantener los tipos en el 0,25%. Por su parte, el BoE mantuvo el tipo de interés oficial en el 4,75%, justificado principalmente por la persistencia de la inflación en los últimos meses impulsando al alza los tipos de interés soberanos hasta 5 p. b