Se ha advertido a los consumidores que se preparen para una subida de los precios del chocolate en los próximos meses, después de que los precios del cacao se hayan disparado más de un 100% y más del doble desde principios de 2024.
Ole Hansen, Director de estrategia de materias primas del banco de inversión danés Saxo Bank, advierte de que la «shrinkflation» podría suponer la reducción del tamaño de las tabletas de chocolate y que los principales fabricantes de chocolate podrían tener más dificultades para garantizar el suministro.
La «shrinkflation» es el término utilizado cuando se reduce el tamaño de un producto manteniendo su precio de etiqueta. Se observa principalmente en la industria alimentaria y de bebidas.
La subida récord de los precios del cacao continúa mientras crece el temor de que a los principales fabricantes de chocolate les resulte más difícil asegurarse el suministro, en medio de una aguda escasez de granos de cacao procedentes de África Occidental.
Mientras que la mala cosecha en África Occidental sigue siendo el centro de atención, también han aumentado los temores en Europa de que las regulaciones entrantes de la UE destinadas a impedir que los productos que destruyen los bosques se vendan en las tiendas harán que sea aún más difícil para los principales fabricantes de chocolate del bloque asegurar el suministro.
Los precios del cacao suben un 27% este año. En el ámbito de las materias primas alimentarias, este fuerte aumento de los precios es un acontecimiento poco frecuente. Sin embargo, esto es precisamente lo que está ocurriendo en el mercado del cacao. En el último año, los precios del cacao se han disparado más de un 100%. Este significativo repunte se debe a una combinación de factores, especialmente en África Occidental. El año pasado las difíciles condiciones climáticas en estos países, sobre todo un calor intenso, afectaron negativamente a la producción de cacao.
Además, la escalada de los costes de los pesticidas y fertilizantes ha impuesto tensiones financieras a los agricultores, dificultando la adquisición de estos componentes vitales para el mantenimiento de los cultivos. Para complicar aún más las cosas, las plagas se han cebado con las plantas de cacao, mermando aún más los rendimientos.
Los consumidores deben prepararse para un repunte de los precios del chocolate. Desde el punto de vista del consumidor, es posible que los efectos inmediatos de la subida de los precios del cacao no se noten directamente. Normalmente, estas subidas de precios tardan entre 6 y 12 meses en reflejarse en los precios al por menor de los productos. No obstante, en el próximo periodo, los consumidores deberían prepararse para un repunte de los precios de las tabletas de chocolate.
Además, es probable que se acentúe la tendencia a la «shrinkflation». Esta práctica consiste en reducir el tamaño de las tabletas de chocolate o la cantidad de bombones de un paquete manteniendo los precios constantes. Por consiguiente, aunque no se produzca una subida brusca de los precios de los artículos de chocolate, la cantidad ofrecida por el mismo precio experimentará una reducción.
La subida parabólica del cacao hasta los 9250 USD por tonelada sigue provocando algunos cambios drásticos y, sin relación alguna, ahora es más caro que el cobre, que actualmente ronda los 8.850 USD por tonelada en Londres. En cuanto al rendimiento, los precios de los futuros en Nueva York han subido un 215% el año pasado y un 118% en lo que va de año. La continua subida refleja sobre todo el pánico reinante en el mercado del cacao, en el que los productores intentan abastecerse en África Occidental, donde las llegadas a los puertos se redujeron casi un 30% el año pasado. Desde hace varias semanas, la subida no ha sido impulsada por los especuladores (hedge funds), que han recortado posiciones tanto en Londres como en Nueva York.
En cambio, la subida ha sido impulsada por los productores de chocolate que compran futuros para abastecerse en las bolsas o para cubrir coberturas (posiciones vendidas). Durante un periodo de ocho semanas hasta el 19 de marzo, los productores compraron 296.000 toneladas en el mercado de futuros de Nueva York y 530.000 toneladas en el de Londres. Durante el mismo periodo, los fondos de cobertura y los grandes especuladores redujeron sus posiciones largas netas en un total de 715.000 toneladas, repartidas entre 439.000 toneladas en NY y 276.000 toneladas en Londres.
El rally continuará hasta que los productores se abastezcan del cacao que necesitan, o hasta que los precios alcancen niveles que aceleren una ralentización de la demanda.
El impacto del aumento del precio del cacao no se ha apreciado en las monas y huevos de chocolate de Pascua de este año. Sin embargo, es probable que el aumento del precio del cacao influya en los consumidores a finales de año. En este mismo orden de ideas, Julien-Pierre Nouen, jefe economista de Lazard Frères Gestion, explica: «La asombrosa subida de los precios del cacao se explica por una combinación de factores: fenómenos meteorológicos extremos, aumento de los costes de producción (energía, fertilizantes y mano de obra) y fuerte crecimiento de la demanda, sobre todo asiática. Ghana y Costa de Marfil, que representan casi dos tercios de la producción mundial de cacao, se han visto duramente afectadas por condiciones climáticas adversas. Las lluvias torrenciales seguidas de periodos muy secos han perturbado las cosechas, mientras que las enfermedades de los cultivos también han afectado a los productores de África Occidental. Esta crisis de abastecimiento y la consiguiente subida de los precios podrían tener repercusiones duraderas en algunas empresas del sector alimentario. Para compensar esta fuerte subida, tendrán que subir los precios, cambiar la composición de sus productos o reducir las cantidades.
Hay que recordar que tras la invasión rusa de Ucrania – uno de los principales productores mundiales de trigo – la subida de los precios del trigo fue mucho menor que la registrada por el cacao. Estas fluctuaciones contrastadas dan fe de la complejidad y volatilidad de los mercados de materias primas, sujetos a factores tan diversos como las tensiones geopolíticas, las variaciones de la demanda y, cada vez más, los fenómenos climáticos.”