Con todo, el BCE presentó una visión más positiva de la economía y, tras la reunión, los mercados financieros apuestan con más convicción por unos tipos del BCE estables en los próximos trimestres.
Puntos clave
El BCE mantuvo los tipos de interés (depo en el 2,00%). La decisión, esperada y unánime, refleja la visión de que la política monetaria está bien calibrada a un entorno incierto, con una actividad resiliente pero de crecimiento modesto, y una inflación en el objetivo pero con algunas inercias.Lagarde volvió a remarcar que la incertidumbre es elevada y argumentó que el BCE no puede comprometerse con ninguna senda futura de tipos, sino que debe seguir tomando decisiones “reunión a reunión”, “según la evolución de los datos” y “con todas las opciones sobre la mesa”.Con todo, el BCE presentó una visión más positiva de la economía en la actualización trimestral de su cuadro de previsiones: mejora el crecimiento previsto del PIB y dibuja una inflación más cerca del 2%.Tras la reunión, los mercados financieros apuestan con más convicción por unos tipos del BCE estables en los próximos trimestres: la probabilidad cotizada de que el depo baje al 1,75% o suba al 2,25% es inferior al 10%.
Escenario económico
El BCE ve mejores perspectivas para la economía de la eurozona. En el nuevo cuadro macroeconómico eleva las previsiones de PIB para el horizonte 2025-27 (proyectando un mejor tono de la demanda doméstica, con avances del PIB de +0,4% t/t en 2026) y, en general, también aumenta algo las previsiones de inflación (por una desinflación más gradual de los precios de los servicios).Más en detalle, ante la resiliencia de la actividad económica en un entorno adverso, Lagarde destacó que las exportaciones han sorprendido favorablemente y, cautelosamente, también destacó una contribución positiva de las inversiones relacionadas con la IA.En adelante, el escenario del BCE prevé que la robustez del mercado laboral, la recuperación del poder adquisitivo y una reducción gradual de la tasa de ahorro de los hogares espoleen el consumo, mientras que la inversión y el gasto público en infraestructura y defensa también impulsarán el crecimiento.En cuanto a la inflación, el BCE destacó dinámicas dispares detrás de una inflación aparentemente estable alrededor del objetivo, contrastando la baja inflación en los precios de los bienes con una inflación de los servicios que ha aumentado en los últimos meses (y cuya inercia explica la revisión al alza de la inflación en 2026, mientras que la leve rebaja de 2027 muy probablemente se deba al retraso en la implementación del ETS2 [régimen de comercio de derechos de emisión] hasta 2028).Esta resistencia de los servicios se debe, según remarcó Lagarde en la rueda de prensa, a unos salarios que han crecido más de lo esperado. Con todo, los datos y las proyecciones siguen apuntando a una clara desaceleración salarial en adelante, como discutimos en nuestra previa.El BCE también reiteró un mapa de riesgos exigente, amplio y rodeado de fuerzas alcistas y bajistas. Y, dada la incertidumbre del entorno, siguió sin ofrecer una declaración explícita sobre si, en balance, dominan los riesgos positivos o los negativos. De hecho, en la rueda de prensa Lagarde fue más cauta que en las últimas reuniones (cuando había explicitado una mejora del balance de riesgos) y se limitó a señalar que fuentes de incertidumbre como las tensiones geopolíticas o la redirección del comercio de China seguirán activas en 2026.
Política monetaria
El BCE dejó el depo en el 2,00%, el refi en el 2,15% y el MLF en el 2,40%, niveles en los que se mantienen desde junio de 2025. Preguntada en rueda de prensa, Lagarde explicó que no hubo discusiones ni de posibles recortes de tipos ni de posibles subidas.En la rueda de prensa también sobrevoló la sucesión de Lagarde al frente del BCE (octubre de 2027). En el caso concreto de Isabel Schnabel, quién recientemente se mostró predispuesta, Lagarde alabó sus cualidades. Pero, preguntada por los periodistas, apuntó que en dos ocasiones anteriores (Christian Noyer y Benoît Cœuré) las opiniones legales se decantaban por la visión de que un miembro del Comité Ejecutivo no puede ser nombrado para otro cargo del Comité cuando vence su mandato (Schnabel está en el Comité desde 2020 y su mandato también vence en 2027).
Reacción de los mercados
La reunión del BCE no provocó sobresaltos destacables en los mercados financieros. Los tipos de interés soberanos prácticamente se mantuvieron planos (tras un cierto movimiento de repunte y distensión entre la publicación del comunicado del BCE a las 14:15 y la rueda de prensa que terminó a las 15:30). También el euro experimentó un movimiento similar, fluctuando alrededor de los $1,17, mientras las bolsas europeas consolidaron una sesión de avances generalizados.
