El juez pide esta actuación del TS, por un delito de malversación y otro de falso testimonio. En el escrito de 34 páginas elevado a la Sala Segunda del Alto Tribunal, el magistrado considera que «la competencia para continuar la instrucción de la causa para el total esclarecimiento de los hechos recogidos» en la pieza relativa a la contratación de la asesora de Begoña Gómez, Cristina Álvarez, que presuntamente ayudó a ésta en sus actividades profesionales particulares desde La Moncloa, «podría corresponder» al Supremo, «ante la imposibilidad de continuar la instrucción sin realizar diligencia de investigación que afectasen de manera directa al aforado don Félix Bolaños García, todo ello por si V.E considera que de la misma resulta posible que se deriven indicios de responsabilidad penal» del mismo por los dos ilícitos referidos.
En relación con el delito de falso testimonio, recogido en el artículo 458 del Código Penal, el juez Peinado aludiendo a la jurisprudencia del Tribunal Supremo (TS), se refiere a «la declaración falsa, consciente y deliberada, realizada por un testigo en un procedimiento judicial» que, a su juicio habría cometido el ministro Bolaños en su comparecencia del pasado mes. Cabe recordar que, para que se cumpla el tipo, la conducta ha de producirse con dolo, es decir, con la intención de faltar a la verdad y no sólo abarcando las mentiras explícitas, sino «también las omisiones intencionadas que puedan alterar la verdad de los hechos»