El sindicato, que ejerce la dirección letrada de las acusaciones personadas en el procedimiento, reclama estas comparecencias a tenor de los últimos informes incorporados a la causa sobre los servicios prestados por David Sánchez para la Diputación de Badajoz y de los que la juez duda.
En su escrito, el abogado José María Bueno explica que el hermano del líder del PSOE tendría que volver a comparecer -como ya hizo el 9 de enero- a tenor de la aparición de estos documentos que acaba de aportar la Diputación al Juzgado de Instrucción número 3 de Badajoz. En concreto, solicita que se le interrogue por su contenido y por la forma en la que fueron fechados, redactados y entregados al ente que dirige Miguel Ángel Gallardo.
«Esta prueba es esencial a juicio de Manos Limpias, pues de lo contrario se permitiría al acusado Sr. Sánchez la aportación de material probatorio (desde nuestro punto de vista, claramente preconstituido, con manifestaciones del mismo explicando supuestamente trabajos que ha llevado a cabo), que pudiera afectar a la causa, y que quedaría al margen del principio de contradicción», expone.
Del mismo modo, reclama a la instructora Beatriz Biedma que cite como testigo a Ángel Seco López (supuesto colaborador de Sánchez) e impute a Luis Carrero, el exasesor de Moncloa cuya contratación se investiga por sus lazos con el músico. La petición se formula también en relación con los informes anuales sobre el músico, puesto que este pasado martes el director del área de Cultura, Candalija, informó al juzgado de que los papeles en cuestión los depositó en su despacho Carrero en un momento en que él no estuvo presente. Se trata de unos documentos que han cobrado especial relevancia para la instructora, tras constatar que los recibió sin rúbrica digital; únicamente manuscrita. Preguntado por este extremo, Candalija respondió que se desconocía la razón por la cual el hermano del presidente del Gobierno los fechó y firmó a mano y que él tampoco los recibió de manera telemática, sino que le llegaron el pasado 3 de febrero.
En su segunda respuesta, conocida esta misma semana, añadió que la persona que se los hizo llegar fue Carrero, la mano derecha de David Sánchez en la Diputación. Según dijo, el excargo de Moncloa le dejó los ocho documentos en su despacho, aunque él no estuvo presente en el momento de la entrega. Al hilo explicó que los escaneó y archivó en una carpeta digital administrativa a la que pueden acceder los servicios centrales del área de cultura. «Se aclara que los documentos internos no acceden al Registro General de salida o entrada de la Corporación y que tales documentos no forman parte de ningún expediente administrativo», expuso.
Estas explicaciones no han convencido a Manos Limpias, desde donde dudan que los documentos, que corresponderían a informes anuales sobre el trabajo de David Sánchez en la Diputación, podrían haberse fabricado «ad hoc». Por todo ello reclaman la imputación de Carrero y, también, que se cite de nuevo al hermano del presidente del Gobierno, quien dimitió de su cargo como jefe de Oficina de las Artes Escénicas hace apenas unas semanas.
«No es ociosa su citación, sino que la misma es fruto de su actuar posterior a su anterior declaración judicial, y por ello de unos nuevos hechos y documentos (la extraña aportación de esos documentos, supuestos informes, por parte de Luis Carrero, rubricados supuestamente por David Sánchez, a la Diputación, y de la misma a este Juzgado)», indica el escrito.
Del mismo modo reclaman también que se requiera a la Diputación de Gallado para que aporte los originales de estos informes que supuestamente habría entregado Sánchez a través de Carrero para que se lleve a cabo un peritaje de la caligrafía. El sindicato reclama que dicha prueba la lleve a cabo el gabinete caligráfico de la UCO para determinar si los documentos se expidieron anualmente o se habrían firmado todos a mano días para su posterior entrega en sede judicial. «Nos preguntamos si es que antes de la fecha en que se llevaron los mismos por parte del Sr. Carrero a la mesa del Sr. Candalija no le constaba a la Diputación qué actividades llevaba a cabo supuestamente su servidor don David Sánchez, y por ello entiendo necesario que se requiera a la Diputación a los fines de que certifique, si antes de “la mañana” del día 3 de febrero de 2025 constaba algún documento con la relación de actividades que pudiera haber llevado los años que estuvo al servicio de la misma», expone.