El margen sobre facturación del resultado bruto de explotación (Ebitda) se ha situado en el 17,9%, al subir un 10,1% y contabilizar 536,7 millones. Desde el grupo con sede en Bilbao destacan que se mantiene la capacidad para invertir 1.500 millones hasta 2025 sin que la Deuda Financiera Neta (DFN) supere dos veces el Ebitda. Esta equivalencia se situó en 1,73 veces al pasado 30 de septiembre, por un pasivo por encima de los 1.200 millones. La tesorería de la corporación ronda precisamente los 1.500 millones.
Herrera, consejero delegado de CIE Automotive, ha señalado que los datos al tercer trimestre “permiten anticipar que el cierre de 2023 mostrará un importante crecimiento de nuestros resultados, a pesar de un entorno inestable, altamente inflacionario y con el tipo de cambio en contra”. Ha añadido que “sabemos aprovechar las oportunidades, buscando siempre maximizar el valor de la compañía para nuestros accionistas”.
En agosto pasado, CIE Automotive vendió su división de forja en Alemania por 55,5 millones. Una operación que no consolida en los resultados al tercer trimestre porque se ha cerrado durante este octubre. La desinversión respondió a ”redirigir recursos humanos y financieros a actividades y geografías de mayor retorno”, según Jesús María Herrera. Entre ellas, la mayor apuesta de la empresa vasca en el exterior está focalizada en India. La operación de Alemania ha supuesto la salida del grupo de cuatro sociedades y tres centros productivos con cerca de 600 empleados y unas ventas de 220 millones de euros en 2022.