Se están registrando plagas de este insecto en toda la península, siendo los lugares más afectados Cataluña, Madrid, Islas Baleares y algunas partes de Andalucía. La presencia de este insecto supone un problema por sus molestas picaduras y porque es el que normalmente nos despierta con su zumbido y no nos deja dormir.
Ante esta situación, desde la Asociación Nacional de Profesionales y Autónomos de las Terapias Naturales, Cofenat, queremos destacar la importancia de mantener alejados a los mosquitos y otros insectos de los seres humanos, no sólo para evitar las incómodas picaduras, sino también para prevenir posibles enfermedades.
Protegerse de los insectos durante los meses de calor es importante, sobre todo para las personas que presentan algún tipo de alergia. La naturaleza nos brinda una amplia gama de posibilidades para ello y, si aún así los insectos consiguen atravesar esa protección, también podemos utilizar elementos naturales para aliviar los síntomas producidos por las picaduras de los insectos, especialmente de los mosquitos”, explica el presidente de Cofenat, San Antonio-Abad.
Como cada primavera-verano, nos enfrentamos a plagas de mosquitos, moscas o avispas, que cada vez atacan de manera más virulenta, provocando desde molestas picaduras hasta infecciones cutáneas de mayor importancia, Para prevenir las picaduras, la naturaleza nos ofrece:
Aceite esencial de lavanda: está recomendado para la cicatrización de heridas. Pero no solo tiene ese uso. Se le atribuyen propiedades para el acné, las picaduras de abeja y avispa, para los eczemas y la dermatitis y como repelente de insectos. Además, por su olor característico, se suele utilizar mucho en la aromaterapia.
Geranio: concretamente, el género Pelargonium, de la familia Geraniaceae, posee un intenso olor a limón, por su alto contenido en citronelol (uno de los principales ingredientes del aceite de citronela) y esto ahuyenta a los mosquitos, abejas, avispas y otros insectos.
Citronela: la citronela aporta una elevada protección (alrededor del 90%), pero ha de tenerse en cuenta que, para alcanzar su máxima efectividad, ha de tener una concentración entre el 5 y el 10%.
Según el tipo de insectos que queramos alejar, podemos utilizar diferentes plantas y especias:
• Mosquitos: citronella, eucalipto, aceite de árbol de té, menta, limón, albahaca, clavo, tomillo, hierbalimón, geranio, lavanda, canela, bergamota, romero.
• Pulgas: cedro, citronella, eucalipto, aceite de árbol de té, hierba-limón, lavanda, naranja, pino.
• Garrapatas: cedro, geranio, enebro, palisandro, tomillo, pomelo, orégano, aceite de árbol de té, eucalipto azul.
Tras la picadura
Si algún insecto logra atravesar esta barrera natural y consigue picarnos, podemos utilizar aceites naturales para combatir los síntomas:
Árbol del té: ayuda a aliviar la sensación de picor.
Lavanda: el aceite de lavanda, al igual que el de árbol del té, reduce el picor producido por la picadura.
Ajo y cebolla: son dos antibióticos naturales. En el caso de las picaduras, se aplican directamente sobre la piel.
Limón: el zumo de limón alivia el picor y, además, es un poderoso antiséptico natural, por lo que también sirve para desinfectar la zona.
Vinagre blanco: ayuda a aliviar la sensación de molestia.
Tomate: el tomate es un calmante natural. De hecho, es el ingrediente principal de muchas de las formulaciones que se hacen hoy en día en cosmética. Además de calmar el picor, el tomate actúa como un antiinflamatorio natural.
Mezcla de esencias: en un roll on de 15ml, que podemos adquirir en tiendas especializadas, añadir: 5ml aceite jojoba, 5ml aceite calendula, 7 gotas de aceite esencial (ae) de lavanda, 4 gotas de árbol de té y 4 gotas menta piperita. Aplicar después de la irritación o picadura, de 2 a 6 aplicaciones diarias. Esto ayudará a calmar la irritación y que el molesto grano desaparezca antes.