El jefe del Ejecutivo propone en la misiva tres compromisos en materia de vivienda para firmar un pacto estatal y que le garanticen que todas “las viviendas que se financien con dinero público mantengan de forma permanente su calificación de vivienda protegida y, por tanto, ofrezcan siempre una alternativa asequible de propiedad o alquiler para la ciudadanía». Sánchez propone triplicar la inversión pública en vivienda, pasando de los 2.300 millones que se movilizaron en el Plan Estatal 2022-2025 a unos 7.000 para el periodo 2026 – 2030. El Gobierno de España se compromete en el nuevo plan a aportar el grueso de esa suma (4.000 millones) siempre y cuando las comunidades asuman su corresponsabilidad y aporten al menos 2.700 millones, según indica en la misiva.
Asimismo, el Ejecutivo recuerda que la política de vivienda es una competencia compartida y dice que los territorios “nunca han recibido tantos recursos del Estado como ahora” (un 47% más entre 2019 y 2025 que entre 2012 y 2018), por lo que sostiene «es esencial que parte de esos recursos se destinen a construir y rehabilitar más vivienda pública, en régimen de propiedad y alquiler», sostiene. En segundo lugar, el Gobierno propone los presidentes autonómicos blindar de forma indefinida la calificación de las viviendas con protección pública. «En los últimos 45 años, las administraciones públicas construyeron en España más de 2,4 millones de viviendas protegidas, pero la práctica totalidad de esas viviendas acabaron siendo descalificadas y vendiéndose en el mercado libre a precios elevados o en manos de fondos buitre», señala.
Por último, el presidente también propone «acabar con el monopolio de la información que tienen los portales privados y crear una base de datos pública que permita a las administraciones estatales y a la ciudadanía conocer los precios reales de compra/venta o alquiler en su ciudad. Solo con esa transparencia se podrán diseñar políticas públicas realmente eficaces y ayudar a la ciudadanía a negociar de forma adecuada el precio de su casa».
Sánchez concluye su carta animando a los presidentes autonómicos a estudiar sus propuestas de “más financiación pública, menos especulación y más transparencia” para poder debatirlas “de forma serena y constructiva este viernes” y lograr “llegar a un acuerdo antes de verano». «Los españoles y españolas no nos eligen para que nos tiremos los trastos a la cabeza o llevemos el ruido partidista a las instituciones. Nos eligen para que dialoguemos, acordemos y resolvamos sus problemas. El de la vivienda es crucial y nosotros debemos estar a la altura».