La línea de avales está dotada con un total de 5.000 millones de euros, tal y como estipula el real decreto-ley aprobado la semana pasada por el Gobierno. Mediante el acuerdo de Consejo de Ministros de este martes se activa el primer tramo por importe de 1.000 millones de euros y se fijan las condiciones aplicables y requisitos a cumplir para acceder a estos fondos.
De este primer tramo de 1.000 millones de euros, unos 750 millones se destinarán a garantizar la liquidez de las empresas y otros 250 millones a avalar nuevos proyectos de inversión. La medida forma parte del ‘Plan de Recuperación y Relanzamiento’, dirigido a establecer una red de seguridad para empresas y trabajadores mediante la activación de todos los mecanismos disponibles para prestar apoyo a las empresas en los sectores afectados por los aranceles de Estados Unidos.
A esta línea de financiación, que será gestionada por el Instituto de Crédito Oficial, en colaboración con las entidades financieras, podrán acceder las empresas exportadoras e importadoras que tengan una exposición significativa, directa o indirecta, al mercado norteamericano.
Tendrá la consideración de empresas exportadoras o importadoras expuestas aquellas cuyo volumen de exportaciones e importaciones a Estados Unidos sea superior al 5% del total. Asimismo, existen empresas que, aunque no exporten directamente a Estados Unidos, pueden verse impactadas por la situación actual. Por ello, asimismo podrán acceder a la línea de avales las empresas expuestas indirectamente, bien por ser proveedores relevantes de empresas radicadas en España de sectores afectados directamente, o bien por formar parte de cadenas de valor global.
Según ha detallado el Ministerio de Economía, la línea de avales se articula en dos modalidades en función del destino o finalidad de la financiación, cada una con sus características y requisitos específicos, y los préstamos podrán solicitarse hasta el 30 de junio de 2026.
La primera modalidad está dirigida a cubrir las necesidades de liquidez a corto plazo de las empresas afectadas. El aval podrá cubrir hasta el 80% del préstamo concedido por la entidad financiera y el plazo de amortización de los préstamos será de hasta cinco años, con uno de carencia. Esta modalidad, que se espera que sea la más demandada en un primer momento, está dotada inicialmente con 750 millones de euros.
La segunda modalidad está dirigida a garantizar préstamos destinados a proyectos de reconversión o transformación empresarial. Se podrá financiar hasta el 80% del valor de la inversión y hasta el 100% del circulante asociado al proyecto de inversión.
En esta modalidad, las operaciones de menos de un millón de euros serán concedidas por las entidades financieras colaboradoras, y las que superen esta cuantía serán concedidas en régimen de cofinanciación con el ICO. La cobertura del aval podrá ser de hasta el 80% y el plazo de amortización de los préstamos de hasta 10 años, con tres de carencia.