«Hace falta volver a unas normas básicas, que son claramente más dosis de libertad, menos dosis de intervencionismo y eso es lo que es necesario para que ese potencial que tiene España se traduzca en realidades», ha indicado Dancausa durante su intervención en el XXX Encuentro Financiero organizado por ‘ABC’ y Deloitte. «Sería un error dilapidarlo en base a ambiciones personales para alcanzar metas a corto alcance y a unos costes absolutamente inasumibles», ha subrayado la primera ejecutiva de Bankinter.
Dancausa ha vuelto a pronunciarse al ser preguntada por el hecho de que Bankinter cotice por encima de su valor en libros cuando casi la totalidad del sector bancario español cotiza a niveles inferiores.
«Si al final los niveles de intervención son mayores, si los niveles de libertad son menores, si se cambian las reglas de juego a mitad de partido y eso no es un buen indicador de que el país goza de una buena seguridad jurídica, si las empresas cada vez tenemos menor capacidad de decisión y esta se transfiere a comisarios políticos, yo creo que es lógico que el inversor busque otros mercados donde no tiene estos problemas», ha enfatizado.
Dancausa ha criticado que estas «experiencias» ya se han vivido en otros países, con unas consecuencias notorias. «Ya hemos visto como han acabado», ha recalcado.
Respecto a la remuneración de los depósitos, Dancausa ha repetido su postura habitual de que no considera que vaya a haber ofertas generalizadas por parte de bancos medianos o grandes a corto plazo. Sin embargo, se ha mostrado «convencida» de que dentro de un tiempo se dejará de hablar de la necesidad de pagar intereses por los depósitos. «Esto va a más y estoy segura de que dentro de unos meses dejaremos de hablar porque estaremos remunerando ya».
En todo caso, la primera ejecutiva de Bankinter ha dicho que la estrategia comercial de los bancos «no debería depender» de presiones externas, sino de la propia liquidez de los bancos, de la competencia entre entidades y de la gestión «responsable» de su balance, criticando que se esté «bombardeando de un lado a otro» a los bancos exigiendo remuneración. De cara al futuro, ha explicado que hay una parte de los beneficios de la banca que «no son sostenibles» al depender del ciclo de política monetaria, especialmente en cuanto termine de depreciarse toda la cartera de crédito.
Sin embargo, ha destacado que otra parte sí es sostenible, porque depende de negocios e iniciativas que se han puesto en marcha para compensar la falta de ingresos que se han venido registrando en los últimos años por el escaso margen de intermediación en un entorno de tipos al 0%. «En relación con los resultados del banco, como tengo el convencimiento de que están asentados en bases enormemente sólidas, vamos a seguir creciendo en rentabilidad y dimensión».