El decreto ómnibus contendrá un paquete amplio de medidas, con especial atención a la economía. El principal motivo por el que el Ejecutivo decidió aglutinar en esta norma una batería de novedades es la imposibilidad para poder aprobar unos presupuestos generales del Estado que entren en vigor el próximo 1 de enero.
En Hacienda explican que una de las medidas que incluirá el decreto es la ampliación hasta junio de la rebaja del IVA de los alimentos y las bonificaciones al transporte público, que se encuentran en vigor, con el añadido de la gratuidad para jóvenes, parados y pensionistas. El Gobierno aún no tiene decidido qué hacer con las ayudas fiscales a la electricidad ahora vigentes. Si se prorrogan, se incluirán en esta norma. La subida del sueldo de los funcionarios para el próximo año, prevista en un mínimo del 2%, también se prevé para este decreto.
En Trabajo, por su parte, intentan cerrar el intenso debate que mantienen con Economía sobre la reforma del subsidio de desempleo, un compromiso pactado con Bruselas a cambio de recibir los fondos europeos. Tiene que estar aprobado antes de fin de año. No es la única medida que está negociando la cartera de Díaz. Los contenidos se centran en prorrogar el IVA de los alimentos, cerrar los acuerdos sobre ayudas al transporte público, subida de pensiones, nuevos sueldo de los funcionarios, fijar el subsidio de desempleo y una nueva politica de desahucios.
En el Ejecutivo también resaltan la importancia de incluir la trasposición de una directiva europea para modernizar y simplificar la Administración Pública que elimina trabas burocráticas.